El intendente de La Matanza fue denunciado por "tocamientos impúdicos" a Melody Jacqueline Rakauskas, que es quien impulsa la investigación en su contra
El titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N° 31, Fernando Mario Caunedo, resolvió rechazar el pedido de sobreseimiento de la defensa de Espinoza, que fue respaldado por la fiscalía, y elevar la causa a juicio, tal como había solicitado la querella.
Además, Espinoza será juzgado por desobedecer la orden de restricción que pesaba sobre él, dictada en junio de 2021, que le impedía acercarse o contactarse con Rakauskas. Según la acusación, la contactó a través de la expareja de ella, Gustavo Cilia, que es allegado al intendente, y con la supuesta intención de que la mujer retirara la denuncia.
"No obstante el esfuerzo de la defensa en desacreditar a la querellante -dice el juez- y el extenso escrito presentado para reclamar el sobreseimiento del imputado, haciéndose eco de las peticiones coincidentes de ambos fiscales; encuentro inadmisible el cierre anormal del proceso que propone en esta etapa crítica, e improcedente la revisión del caso que de mí se pretende, en sustitución de la discusión que debe darse en un juicio oral y público, como ha previsto el legislador y pide la querellante".
Sostuvo que desconocer la decisión de la Cámara sería una "suerte de alzamiento" contra un tribunal superior, y que no elevar el caso a juicio sería como sustituir al Tribunal oral.
"Y más allá de que en el caso solo medió acusación por un abuso sexual simple, porque la propia querellante admitió que frente a sus reiteradas resistencias y pedidos de que se fuera, el imputado terminó vistiéndose y retirándose sin consumar ninguna relación sexual; el hecho no pierde por ello entidad, ni releva al sistema de justicia del máximo esfuerzo para su investigación y juzgamiento", añade.
Rakauskas denunció penalmente a Espinoza en 2021 por el abuso sexual que asegura haber sufrido el 10 de mayo del mismo año, cuando el jefe comunal del PJ fue a su casa a tratar temas "laborales".
Según afirmó ante la Justicia, se trató del tercer encuentro que mantuvo con el intendente en el ámbito privado. Aquel día, Espinoza le manifestó sentir dolor de cuello y, al tiempo que se desabotonaba la camisa, le pidió que le practicara un masaje. Siempre según el relato de Rukasuskas, Espinoza se aflojó el cinturón, sujetó de las muñecas a su entonces secretaria y la llevó a la habitación, donde se produjo el hecho denunciado.
"Ella que no recordaba exactamente cómo pasó, pero que él logró terminar encima suyo en la cama. Durante ese lapso, comenzó a besarle la zona de sus pechos y a tocarla por encima de la ropa mientras le decía 'quedate tranquila, siempre te tuve ganas, va a estar todo bien' y le pedía que le practicara sexo oral", dice el escrito del juez. Finalmente, Espinoza se retiró del domicilio.
A aquella noche le siguieron "recomendaciones" de su expareja y del exintendente para adecuar su conducta. "Tenés los días contados", le habría dicho Espinoza en su despacho.
En mayo de este año, fue procesado por la jueza de primera instancia María Fabiana Galetti, quien además le prohibió el contacto con su exsecretaria y dispuso un embargo sobre sus bienes de $1.500.000.
Ese procesamiento fue ratificado por la sala VII de la Cámara de Crimen a principios de julio. Los "tocamientos impúdicos" denunciados por Rakauskas configuran, según ambas instancias, el delito de "abuso sexual simple", que contempla penas de hasta cuatro años de cárcel.
El desarollo del juicio tendrá su correlato en la causa civil, que tramita en paralelo.
Fuente: La Nación