El presidente de Estados Unidos presentó la futura "Trump Class", amenazó con acciones dentro de Venezuela y redobló su ofensiva contra el narcotráfico en la región.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció este lunes la construcción de un nuevo buque de guerra que será bautizado como "Trump Class" y lanzó una dura advertencia al mandatario venezolano, Nicolás Maduro, al señalar que "si se hace el duro, será la última vez que pueda hacerlo".
Durante una presentación realizada en su residencia privada de Mar-a-Lago, en Florida, Trump aseguró que sería "inteligente" que el líder chavista deje el poder y advirtió sobre posibles consecuencias si Venezuela desafía a Washington. Además, reiteró que la próxima fase de la lucha contra el narcotráfico incluirá operaciones terrestres, además de las acciones navales ya en curso.
Al ser consultado sobre por qué Maduro debería tomar en serio una eventual intervención estadounidense en territorio venezolano, Trump respondió que dependerá de la actitud del gobernante. "Puede hacer lo que quiera. Es lo que él decida hacer. Si se hace el duro, será la última vez que pueda hacerlo", afirmó.
El mandatario estadounidense también apuntó contra el presidente de Colombia, Gustavo Petro, a quien calificó como "un alborotador". Si bien elogió al pueblo colombiano, volvió a insistir en que el país alberga al menos tres grandes fábricas de cocaína que abastecen al mercado estadounidense y reclamó su cierre inmediato.

El mandatario estadounidense planifica asfixiar las arcas del chavismo con un boqueo al sector petrolero. El poder de las encuestas en un año próximo electoral.
En relación con el nuevo proyecto naval, Trump aseguró que los futuros acorazados serán "los más poderosos de la historia", con una capacidad superior a la de cualquier otra flota militar existente. En una primera etapa se construirán dos unidades, con el objetivo de alcanzar un total de 25 buques. Según indicó, las obras comenzarán de manera inmediata en el estado de Florida.
La iniciativa forma parte de una orden presidencial orientada a revitalizar la industria naval estadounidense y reducir la brecha con potencias como China. En ese marco, Trump afirmó que Estados Unidos se encuentra "15 años adelantado" en materia de armamento indetectable.
El anuncio se produjo en medio de una creciente tensión en el Caribe sur con el gobierno de Venezuela. Trump sostuvo que el despliegue naval frente a las costas venezolanas permitió reducir en un 96% el tráfico marítimo de drogas y adelantó que las operaciones se ampliarán a rutas terrestres "en cualquier lugar donde ingresen drogas".
Finalmente, el presidente confirmó que Estados Unidos confiscó buques petroleros venezolanos y aseguró que tanto las embarcaciones como el crudo incautado quedarán bajo control estadounidense, ya sea para su venta o para incorporarlos a las reservas estratégicas.