El Mercedes-Benz 380 SLC, lanzado en 1978, es un coupé de lujo que combina elegancia, rendimiento y robustez. Equipado con un motor V8 de 3.8 litros, generaba 218 caballos de fuerza, lo que le permitía una conducción suave y potente. Este modelo formaba parte de la serie "SLC", una variante de techo rígido del famoso 280 SL, y destacaba por su diseño sofisticado, suspensión avanzada y un interior lujoso. Con una carrocería más larga que su predecesor, el 380 SLC se convirtió en un ícono de los vehículos deportivos de lujo de la época.