Deportes Un homenaje lleno de amor

Luis Enrique recuerda a su hija Xana con un emotivo gesto tras la consagración de la Champions

Luis Enrique homenajeó a Xana en la final de la Champions: usó una remera con su dibujo y los hinchas del PSG desplegaron una bandera conmovedora.

Sabado, 31 de Mayo de 2025

Luis Enrique vivió una jornada histórica y profundamente emocional. No solo condujo al Paris Saint-Germain a su primera Champions League tras golear 5-0 al Inter en Múnich, sino que rindió homenaje a su hija Xana, fallecida en 2019, con una remera y un gesto que conmovió al mundo del fútbol.

Según supo Noticias Argentinas, el entrenador del PSG vistió una remera negra con el dibujo de un personaje creado por su hija menor, llamado "Weungway". La imagen muestra a una familia con una bandera del club y lleva la frase en catalán "És en Nos Weungways", símbolo del vínculo eterno entre Luis Enrique y Xana.

El PSG goleó al Inter y alzó la Champions League por primera vez

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El conjunto parisino se adelantó en el resultado con los tantos de Désiré Doué por duplicado, Achraf Hakimi, Khvicha Kvaratskhelia y Senny Mayulu ante un rival que no hizo pie en Alemania

Pero no fue el único tributo. Después del partido, los hinchas del PSG desplegaron una gran bandera con el mismo personaje y mensaje, en el estadio Allianz Arena, en un momento que emocionó a todos los presentes. El gesto colectivo se volvió viral y fue replicado en redes sociales y medios internacionales.



"Xana estará espiritualmente", había anticipado el DT en la previa. Y así fue. Con la camiseta sobre el césped y la bandera en las tribunas, la niña de nueve años que falleció por un osteosarcoma estuvo presente en el mayor logro deportivo del técnico desde su regreso a los banquillos.

La familia Martínez Cullell también mantiene vivo su recuerdo a través de la Fundación Xana, que acompaña a familias de niños con enfermedades graves. "Xana sigue viva en nosotros, cada día hablamos de ella", declaró alguna vez Luis Enrique. Y este sábado, en Múnich, el fútbol fue testigo de esa presencia imperecedera.

Fuente: NA