El canciller argentino Pablo Quirno se declaró confiado en que el acuerdo de libre comercio entre el Mercosur y la Unión Europea, cuya negociación se extiende desde hace 26 años, está próximo a concretarse, a pesar de las recientes demoras provocadas por tensiones políticas internas en algunos países europeos.

En una entrevista, el jefe de la diplomacia argentina sostuvo que el Gobierno mantiene una visión "optimista" respecto de la firma de este pacto histórico y defendió la necesidad de avanzar con una agenda abierta de comercio exterior. "El acuerdo del Mercosur-UE lleva 26 años y somos optimistas en que se va a firmar prontamente", afirmó Quirno, al tiempo que remarcó que el objetivo común es avanzar hacia una mayor apertura comercial que beneficie a consumidores y empresas de ambas regiones.

El aplazamiento de la firma, que estaba previsto para este fin de semana durante la cumbre del Mercosur en Foz do Iguaçu, respondió a la presión de países como Italia y Francia, en un contexto de fuertes protestas de agricultores en Bruselas. Miles de manifestantes se movilizaron con tractores frente al Parlamento Europeo bajo consignas como "Detengan al Mercosur", al advertir que la entrada de productos sudamericanos -como carne, arroz o soja- podría generar competencia desleal por diferencias en las normas productivas.

Quirno relativizó estas demoras y sostuvo que forman parte de la dinámica propia de negociaciones complejas. "Tenemos que esperar que Europa termine de solucionar sus problemas internos. El mercado del Mercosur es importante para Europa", señaló, al destacar el valor estratégico del acuerdo para ampliar el comercio bilateral y diversificar mercados.

El canciller subrayó además que la firma del tratado no será un punto final, sino el inicio de una nueva etapa de integración. "La firma del acuerdo es el comienzo de un camino", aseguró, al remarcar el potencial del pacto para promover inversiones y fortalecer los vínculos comerciales de la Argentina.

En ese marco, recordó que el país mantiene abiertas negociaciones con otros socios estratégicos como Vietnam, Japón y el Reino Unido, y adelantó que el acuerdo con Estados Unidos está prácticamente cerrado, a la espera de la coordinación de la agenda de firmas. También defendió la necesidad de flexibilizar las reglas del Mercosur para permitir acuerdos bilaterales que impulsen exportaciones e inversiones.

En el cierre de la entrevista, Quirno se refirió a la situación en Venezuela y expresó una dura condena al régimen de Nicolás Maduro. "Argentina condena enérgicamente lo que sucede en Venezuela. La dictadura no ha respetado los procesos democráticos", afirmó, y repudió la desaparición del gendarme argentino Nahuel Gallo. "La dictadura de Maduro tiene que terminar", enfatizó, al asegurar que el Gobierno continuará llevando sus reclamos a los foros internacionales.

Quirno participó este viernes de la reunión de cancilleres del Mercosur en Foz de Iguazú, Brasil, donde los ministros analizaron el presente y futuro del bloque regional, con eje en la defensa de la democracia, el Estado de derecho y la necesidad de avanzar en una agenda de modernización, reducción de trabas comerciales y agilización de las negociaciones externas.