Trenes, subtes y cientos de vuelos cancelados marcan el impacto de la huelga que durará hasta la medianoche de hoy. Los colectivos urbanos funcionan con normalidad.
Desde la madrugada de este jueves, rige el paro general convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT), que se extenderá por 24 horas y cuenta con la adhesión de ambas Centrales de Trabajadores de la Argentina (CTA).
Es la tercera huelga nacional impulsada por la central sindical desde que Javier Milei asumió la presidencia, y se enmarca como una protesta contra las medidas económicas del actual gobierno.
Durante las primeras horas del paro general de la CGT, el servicio de estaciones de combustible fue desparejo. Hay algunas que funcionan con playeros y otras con personal jerárquico. Mientras tanto, con YPF a la cabeza, son varios los puestos de expendio cerrados.
Con respecto a los residuos, la Ciudad amaneció con mucha basura alrededor de los contenedores ya que, durante la madrugada, no funcionó el servicio de recolección.
En Lanús una kiosquera opinó que el paro "es más político, hay que salir a trabajar igual, sienten una presión de que ya estén acostumbrados de hacer paro", y advirtió sobre las unidades de colectivos que temían ser apedreadas por circular. "Que cada uno haga paro por decisión propia y no te fuercen a hacerlo", afirmó.
Una mujer que esperaba el colectivo en Moreno, narró el periplo vivido del día de hoy. "Tomo siempre el tren, hoy tengo que tomarme dos colectivos, tengo que llegar a las 9, desde las 6 de la mañana que estoy en Moreno, dijo cerca de las 7:30 una pasajera. Si yo no trabajo, no cobro, es así", sostuvo ella, que trabaja como enfermera.
Un matrimonio que vive en La Reja, día a día llegan a la terminal de Moreno de ómnibus para vender facturas y café. "Todos los días estamos acá, no tenemos descanso. Siempre (firmes) acá, siempre, por ahí un feriado no venimos para descansar", expresó el hombre.
Ante la pregunta de la periodista de TN, de si no hay fines de semana de descanso, el trabajador respondió. "No, no se puede, no venimos y no comemos", sentenció.
Es el último estudio de D"Alessio IROL - Berensztein.
Lautaro, un trabajador a punto de abordar un colectivo también en Moreno, apuntó contra los líderes gremiales en Radio Mitre. "Son los tres mismos gordos sindicalistas de siempre. Por suerte, Milei les sigue ganando la pulseada, porque si no fuera por él, no tendríamos colectivos. Ojalá siga así y les saquen la guita, porque es guita nuestra, no de ellos", dijo, ofuscado.
Silvana, una empleada doméstica, agregó antes subirse a un colectivo rumbo a Caballito: "Si no voy, no cobro".
Los operadores libertarios demostraron ser lo suficientemente hábiles como para abrir pequeñas fisuras en el mundo gremial. El escenario que viene.