En medio de una creciente tensión en Medio Oriente, altos funcionarios iraníes lanzaron una advertencia directa a Estados Unidos: si Washington decide intervenir militarmente junto a Israel, Teherán podría bloquear el Estrecho de Ormuz, una de las rutas marítimas más estratégicas del planeta.

El paso conecta el Golfo Pérsico con el de Omán y es clave para el comercio global de petróleo, ya que por allí transita cerca del 25% del crudo que se comercializa en el mundo. La amenaza, formulada por legisladores y miembros del comité de seguridad nacional iraní, apunta a ejercer presión sobre Occidente mediante la interrupción del flujo energético.

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Ali Yazdikhah, parlamentario de Teherán, sostuvo que Irán tiene el derecho legítimo de obstaculizar el comercio petrolero si Estados Unidos se involucra formalmente en el conflicto. Behnam Saeedi, también integrante del parlamento, respaldó la posibilidad de cerrar el paso como una opción de respuesta.

Aunque un bloqueo total del Estrecho es improbable, Irán cuenta con capacidad militar para volverlo intransitable o extremadamente riesgoso. Durante la guerra con Irak en los años 80, ya recurrió a tácticas como el uso de minas marinas, lanchas rápidas y misiles contra embarcaciones comerciales.

Un informe del Congreso estadounidense advierte que cualquier intento de obstrucción podría escalar rápidamente en una respuesta militar internacional, dada la sensibilidad del mercado energético global. La Agencia Internacional de Energía también alertó sobre el impacto inmediato que tendría una interrupción en esa vía marítima.

La advertencia iraní se produce mientras el presidente Donald Trump evalúa un posible respaldo militar a Israel en su ofensiva contra instalaciones nucleares iraníes. El escenario, cada vez más volátil, amenaza con arrastrar a actores globales a un conflicto de escala mayor.

Fuente: Euronews