El próximo 11 de diciembre, el INDEC publicará el dato oficial de inflación de noviembre 2025, un indicador que el mercado estima levemente por encima del 2%. Aun así, en el Gobierno destacan que, pese a las correcciones de precios que todavía atraviesa la economía, la Argentina mantiene un nivel de inflación sustancialmente más bajo que en años previos, demostrando la solidez del programa económico impulsado por el presidente Javier Milei.

Tras haber alcanzado un piso del 1,5% en mayo, los precios mostraron una moderada suba en la segunda mitad del año. Según las consultoras privadas, noviembre habría cerrado en un rango del 2,3% al 2,5%, niveles que continúan muy por debajo de los que el país registraba antes del cambio de gobierno, cuando mensualmente se acumulaban aumentos de dos cifras.

Los especialistas coinciden en que esta ligera aceleración responde a factores puntuales:

- la normalización de precios relativos,

- las últimas actualizaciones tarifarias,

- y el impacto rezagado de la depreciación del peso ocurrida a mediados de año.

Aun así, proyectan que la inflación interanual se mantendrá en torno al 30%, una cifra que confirma la tendencia clara hacia la estabilización.

Qué se espera del informe de noviembre

Las consultoras privadas identifican a Alimentos, Servicios Regulados y Transporte como los principales impulsores del índice, aunque cada rubro avanzó con distinta intensidad:

- EcoGo: estimó un 2,5%, con un fuerte peso del rubro carne y frutas.

- Equilibra: también calculó 2,5% y destacó subas concentradas en tarifas y transporte.

- Libertad y Progreso: proyectó 2,3%, señalando que la inflación anual cerraría en torno al 27,7%.

- REM (BCRA): ubicó la variación mensual en 2,3%, con un pronóstico interanual de 30,4%.

- C&T: para el GBA, calculó 2,4%, señalando tres factores clave: el incremento de la carne, la actualización de servicios regulados y los descuentos del Cyber Monday, que ayudaron a moderar el índice en ciertos rubros.

El dato clave: la tendencia sigue siendo descendente

A pesar del ajuste mensual, la inflación interanual continúa desacelerando de manera consistente, ubicándose entre 29% y 31%, según estimaciones privadas. Esto confirma que el plan del Gobierno -basado en disciplina fiscal, orden monetario y corrección gradual de distorsiones- está logrando consolidar un sendero de previsibilidad.

Desde la administración libertaria señalan que el país está atravesando la etapa final de sinceramiento de precios, necesaria para liberar distorsiones acumuladas durante años, y que una vez superado este proceso los índices mensuales volverán a ubicarse en torno al 1%, como ocurrió en el segundo trimestre del año.