La misteriosa llegada de una supuesta mánager brasileña al club sacudió los cimientos del Pincha y podría derivar en la salida de Eduardo Domínguez.
Estudiantes de La Plata atraviesa un clima caliente tras la eliminación de la Copa Argentina ante Aldosivi. Sin embargo, la derrota fue apenas el detonante de un trasfondo aún más complejo, con un nombre propio que encendió todas las alarmas en el club: Carina Magnabosco, apodada "la Barbie brasileña", una supuesta mánager vinculada directamente a Juan Sebastián Verón.
Todo se desató luego de las palabras de Eduardo Domínguez, quien puso en duda su continuidad: "Tengo que pensar bien si voy a seguir o no. Hay cosas que no me gustan", dijo en conferencia de prensa, dejando entrever que hay situaciones fuera del campo que afectan su trabajo.
Poco después, trascendió que el foco de ese malestar sería la aparición repentina de Magnabosco, una figura polémica en el mundo del fútbol, que habría sido presentada como nueva encargada del área futbolística, desplazando sin previo aviso a Marcos Angeleri. La versión indica que fue el propio Verón quien promovió su llegada, algo que habría generado fuertes cortocircuitos en el cuerpo técnico y el plantel.
Según testigos, la brasileña irrumpió en una práctica en el Country Club de City Bell y se presentó como autoridad, asegurando tener un acuerdo con el presidente del club. Incluso se la vio acompañando a Verón en la platea del estadio de Defensa y Justicia durante la derrota ante el "Tiburón".
Carina Magnabosco se presenta en sus redes sociales como "Football Scout PRO" y asegura estar certificada por FIFA, además de especializarse en derecho deportivo, análisis y gestión. Nacida en Brasil, fue apodada por la revista Showroom News Magazine como "La Barbie del fútbol".
Sin embargo, su figura está rodeada de controversias: fue denunciada en redes sociales como estafadora y hay quienes afirman que no puede ingresar ni a Brasil ni a México por causas judiciales no especificadas. Este lunes, en medio del escándalo, eliminó todas sus publicaciones en Instagram, donde hasta el momento posaba con figuras del fútbol internacional y promocionaba su rol como "mánager".
La situación generó un cimbronazo en el Pincha, donde se teme por una posible renuncia de Domínguez y una nueva crisis institucional. Todo apunta a que las próximas horas serán decisivas para el futuro inmediato del club.
El DT detectó falencias en el aspecto físico del plantel y ordenó una rutina más exigente a dos semanas del debut ante Benfica de Portugal.