Oliver Oakes, ingeniero de la escudería francesa, reconoció que la llegada del piloto argentino generó ruido interno y afectó el panorama del australiano Jack Doohan.
Sigue el ruido en Alpine por la situación de Jack Doohan y la irrupción del argentino Franco Colapinto. En un año donde el rendimiento del australiano está en el ojo de la tormenta, el jefe del equipo, Oliver Oakes, rompió el silencio sobre lo que generó la llegada del argentino desde Williams Racing.
"Me molestó un poco porque fichamos a otro piloto reserva", dijo Oakes en el podcast F1 Explains, en referencia a Colapinto. Y agregó: "La intención no era que todos se arriesgaran con Jack; me molestó mucho porque creo que es un piloto joven y necesita su oportunidad".
El ingeniero fue más allá y se refirió a la presión mediática que está soportando Doohan en este inicio de temporada: "Me sentí muy mal por él, todos lo estaban buscando incluso antes de que debutara en la Fórmula 1". Hasta ahora, el australiano no logró sumar puntos y acumula resultados flojos en sus primeras cinco carreras del año.
Oakes también apuntó al entorno digital del deporte: "Supongo que todo esto es parte del mundo hoy en día" pero la desventaja es que hay mucho más ruido". En ese contexto, Colapinto se mantiene en el centro de la escena como el posible reemplazo si los números de Doohan no mejoran.
El argentino, que llegó como piloto reserva, no estará presente en el GP de Miami ni siquiera como piloto de reserva, pero su figura crece mientras Alpine sigue sin levantar cabeza y se especula con que podría estar en Imola, el 18 de mayo próximo.
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