Se trata de Pablo Grillo, quien fue golpeado por un gas lacrimógeno en la cabeza. Perdió masa encefálica y fue operado de urgencia.
En el marco de los intensos enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas de seguridad durante la marcha de jubilados frente al Congreso de la Nación, Pablo Grillo, un reportero gráfico, sufrió una grave lesión en la cabeza que le causó pérdida de masa encefálica y lo dejó en lucha por su vida en el Hospital Ramos Mejía, según fuentes oficiales del gobierno porteño. El golpe fue provocado por una cápsula de gas lacrimógeno disparada por la Policía.
Grillo fue uno de los doce civiles heridos durante los violentos choques en las calles del centro de la Ciudad de Buenos Aires. En un video registrado por Emanuel Coria, periodista de FM La Tribu, se muestra el momento en que Grillo fue alcanzado mientras trabajaba cubriendo la protesta. Coria relató: "Se empezaron a escuchar tiros, entonces me acerqué para ese lado y cuando estaba filmando pude captar el momento. Había un cordón policial que estaba avanzando y desde ahí venían todos los gases, los disparaban al aire y llegaban lejísimos. Para mí fue bastante adrede".
"Lo que menos había era jubilados, lo que había era un grupo de violentos", dijo el jefe de Gabinete.
El testigo agregó que varios periodistas y personas cercanas formaron una ronda alrededor de Grillo para brindarle ayuda. "Lo llevaron en andas media cuadra para adentro. Le salía mucha sangre", señaló Coria. Sin embargo, según el periodista, la policía continuó avanzando mientras se estaba armando la ronda de auxilio.
En la noche, el padre de Pablo Grillo, Fabián Grillo, confirmó que su hijo estaba siendo operado de urgencia y que su situación era grave. "La situación es grave, está trabajando de forma independiente", expresó el hombre, visiblemente preocupado.
El saldo de la manifestación dejó un total de 23 civiles heridos, de los cuales cuatro permanecen internados en diferentes hospitales de la ciudad. Los hospitales Ramos Mejía, Argerich, Santa Lucía y Álvarez recibieron a los afectados. Además, un policía de la Ciudad de Buenos Aires resultó herido de bala mientras cumplía con sus tareas de seguridad en la Avenida Presidente Roque Sáenz Peña (Diagonal Norte) y Mitre. El uniformado, quien sufrió una fractura expuesta en su brazo izquierdo, fue operado en el Hospital Argerich.
La ministra de Seguridad indicó que fueron detenidas al menos 150 personas y que 17 policías resultaron heridos en los enfrentamientos; contó que fue secuestrada evidencia que indicaría que los desmanes estuvieron "premeditados"
Se registraron también otros seis efectivos heridos, tres de la Policía Federal Argentina (PFA) y tres de la Prefectura Naval Argentina (PNA), que se encontraban en las inmediaciones del Congreso. Los enfrentamientos fueron intensos, con enfrentamientos cuerpo a cuerpo, el uso de gases lacrimógenos, bastonazos, pedradas y el despliegue de camiones hidrantes para dispersar a los manifestantes.
La protesta, que inicialmente congregó a jubilados que buscaban visibilizar sus demandas, rápidamente se tornó en un escenario de violencia e inestabilidad, con la participación de distintos grupos políticos y sectores sociales. La tensión en las calles reflejó un clima de creciente polarización política, con acusaciones cruzadas entre los actores involucrados en los disturbios.