Luis Caputo salió al cruce, una vez más, de quienes sostienen que el tipo de cambio está atrasado. El JP Morgan recomendó días atrás cubrirse ante un eventual salto cambiario y salir de los bonos en pesos.
El Gobierno no da un paso atrás en su plan. Frente a las críticas y advertencias que diferentes economistas realizan por la apreciación cambiaria y el rojo en la cuenta corriente del balance de pagos, el ministro de Economía, Luis Caputo, adoptó un tono burlón y disparó: "El dólar flota, por lo tanto, al que le parezca que está barato... Agarrá los pesos y comprá. ¡No te lo pierdas campeón!".
Así, el titular del Palacio de Hacienda atacó a los "empresarios, periodistas y colegas" que plantean dudas sobre la sostenibilidad del programa económico y las consecuencias de la política cambiaria oficial. Fue en una presentación en la que retomó el estilo confrontativo de Javier Milei. No casualmente, Caputo dijo ser "como hermanos" con el Presidente y enfatizó en la "simbiosis" que lo une con el primer mandatario.
El expresidente del BCRA rechazó también las observaciones por la salida de argentinos al exterior por viajes y el gasto fuera del país en rubros como turismo o indumentaria, un debate que creció luego de que el Indec confirmara el rojo en la cuenta corriente en el primer trimestre por más de US$5000 millones. Caputo fue más allá y, con un mensaje cargado de sarcasmo, apuntó contra esas críticas: "No confundamos los conceptos. Argentina no está en una situación ni parecida a un problema. A los que se quejan de que el dólar está barato, agradézcanle al turismo, si no estaríamos en $900".
Fue una presentación ante 700 personas en el marco del IAE Summit, organizado en el Centro de Convenciones de Buenos Aires, donde Caputo ubicó a la disciplina fiscal del Gobierno como pilar central del esquema. "Tenemos un déficit de cuenta corriente absolutamente necesario y lógico para un país que está subcapitalizado", dijo el ministro, quien proyectó que esa variable será al final de 2025 de entre 1,5% y 2% del PBI. A su vez, reiteró que como el Estado nacional ordenó sus cuentas, ese déficit externo es un tema "de privados".
"Hay una cosa muy obvia: el dólar flota. Si tenés pesos y el tipo de cambio flota, y vos sabés que está baratísimo, comprá, no te la pierdas campeón", aseguró, irónico y confiado, ante un auditorio de 700 ejecutivos reunidos ayer en el cierre del Summit IAE Business School, la escuela de negocios de la Universidad Austral.
Y siguió: "tomando los últimos dos meses, los que dicen que el dólar está barato no están mirando lo que está pasando en el mundo. El dólar se hizo pomada contra la mayoría de las monedas, salvo con la de Argentina. Desde que salimos del cepo, lejos de tener un tipo de cambio menos atractivo, es sustancialmente más atractivo".
Caputo también cargó contra quienes vienen emitiendo pronósticos desalentadores en torno al rumbo del modelo económico del gobierno libertario. "En enero del año pasado era "van a devaluar", "no pasan de febrero". Después que la inflación no podía caer por debajo del 10, después por debajo del 8. De repente de un mes para el otro bajó a un 4, y entonces dijeron que iba a ser a costa de una recesión infinita y la economía creció un 6% en el año", aseguró.
"Entonces dijeron "no se van a poner de acuerdo nunca con el Fondo, no pueden salir del cepo, están atrapados". Y cuando mostrás que salís del cepo, entonces (dijeron) "va a ir al techo de la banda. Pegá alguna negro, pegá alguna", ironizó.
Ante este escenario Caputo ratificó que el Banco Central (BCRA) solo comprará dólares si el tipo de cambio perfora el piso de las bandas de flotación, hoy levemente por debajo de los mil pesos. Asimismo, enfatizó que es el Tesoro el que necesita acumular reservas para cumplir con sus obligaciones y diagramó una hoja de ruta para lograr ese objetivo.
El funcionario dijo que son cuatro las fuentes que tiene en mente su cartera para sumar divisas: privatizaciones de empresas públicas, venta de activos, concesiones (como las de las hidroeléctricas) y block trade (o bloques de venta).
Sobre las críticas por el creciente déficit de cuenta corriente debido al atraso cambiario, Caputo aseguró que no es algo que le preocupe. Por el contrario, lo catalogó como "necesario", dado que es el resultado de transacciones entre privados.
En el primer trimestre del año la cuenta corriente dio un saldo negativo superior a los 5 mil millones de dólares. Específicamente resaltó un déficit histórico de servicios, explicado en su mayor parte por la balanza turística, el cual fue acompañado por el crecimiento de las importaciones de bienes, algo que en materia de divisas se vislumbró más que nada en el sector automotriz.
En este contexto, en el mercado ven al Gobierno haciendo todo lo posible para contener el precio del dólar con diferentes mecanismos de intervención indirecta. De esta manera, explican muchos economistas, el ancla cambiaria sigue siendo, junto con el ancla salarial, determinante a la hora de explicar la desaceleración de la inflación.
Los mandatarios provinciales habían impulsado un proyecto para modificar la distribución del impuesto a los Combustibles y el manejo de los Aportes del Tesoro, pero la Casa Rosada lo rechazó. Qué va a pasar ahora.