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Avanza la reforma laboral: se definió el nuevo sistema de despidos

Las aseguradoras le había pedido al Gobierno poder participar del negocio. El Ejecutivo prometió la reglamentación para esta semana.

Martes, 10 de Setiembre de 2024

Después de idas y vueltas con la UIA y la CGT, el Gobierno ajustó los últimos detalles de la reforma laboral que busca reglamentar esta semana y ya tiene listo el nuevo sistema de despidos con el que apunta a reducir los juicios laborales. Se trata del fondo de cese, un sistema que traerá como novedad el ingreso de las aseguradoras para administrar los aportes de las empresas destinados a las indemnizaciones de sus trabajadores.

Desde la promulgación de la Ley Bases en julio, el Ejecutivo avanzó con la reforma del Estado, el régimen de inversiones RIGI y las privatizaciones, pero no pudo destrabar el módulo laboral, donde se contempla el despido por bloqueo, la figura del trabajador independiente que contrata hasta 3 empleados y el fondo de despidos. "Estuvimos trabajando todo el fin de semana, la idea es que salga esta semana", confirmaron fuentes oficiales.

La apuesta con el esquema de cesantías es doble: por un lado, avanzar en la flexibilización laboral, ya que empresas y trabajadores "van a poder diseñar el sistema que quieran", tal como explicó el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger. Y, por otro, se busca expandir el mercado de capitales con un nuevo negocio para las compañías aseguradoras y financieras, que van a poder colocar dichos fondos en acciones, bonos y fondos de pymes.

El fondo que viene a reemplazar la indemnización por despido sin causa se inspira en el esquema del gremio de la construcción (UOCRA) y, como aquel, deberá ser acordado con los gremios en cada convenio. En este caso, el empleador deberá realizar un aporte mensual de hasta el 8% de la remuneración computable y podrá optar por contratar un sistema privado de capitalización a su costo para solventar la indemnización.

"Es un sistema que se puede acordar de diferentes maneras: una especie de seguro donde se hace un aporte menor y cuando vas despidiendo lo vas pagando, puede ser a cargo del empleador que se acuerde la indemnización, pero también un seguro de retiro que sea parte del sistema con indemnización distinta, y puede ser uno de capitalización individual de la persona, regulado por el Banco Central", explicó un funcionario.

Los últimos retoques surgieron después de las conversaciones del sector empresario con diversas áreas del gobierno, pasando por la secretaría de Trabajo, el Ministerio de Desregulación y el de Economía. Los directivos de la cámara de compañías de seguros de retiro y de vida (AVIRA) ratificaron el pedido la semana pasada durante un almuerzo con el secretario de Finanzas, Pablo Quirno, en el hotel NH. "Lo estamos evaluando", les respondió.

El negocio para las aseguradoras

Atraídas por el modelo chileno, las aseguradoras buscan ofrecer una suerte de "caja de ahorro" donde el empleador deposite un porcentaje del salario y el trabajador pueda retirarlo ante el despido o renuncia. Mientras la Ley de Contrato de Trabajo contempla una indemnización equivalente al salario por año de antigüedad, la reforma prevé que las empresas aporten el 8% desde el inicio del fondo para todos sus empleados.

El negocio de las compañías de seguros será captar esos fondos para invertirlos, obtener un rendimiento y cobrar un porcentaje del excedente. "Supongamos que la indemnización va a la compañía de seguros, eso lo vamos a invertir y generarle un interés y al cabo de un tiempo lo podés retirar hasta un porcentaje del sueldo. La clave es que logre igualar a la inflación o superarla", dijo una fuente del sector.

Luis Caputo les anticipó a las aseguradoras que tendría novedades sobre el nuevo esquema hace dos semanas cuando las recibió en su cartera y se mostró interesado en potenciarlas. La industria maneja inversiones por US$ 11.000 millones, mayormente fondos de seguros obligatorios colocados en títulos públicos de corto plazo. "Tienen que ser una de las bases del crecimiento del financiamiento y de la economía", les dijo a los popes.

Voces en contra

Para la Asociación de Abogados Laboralistas (AAL), el fondo de cese no cumple los estándares constitucionales vigentes, ya que "no sólo no repara adecuadamente el daño que genera la extinción del vínculo, sino que al no establecer ninguna sanción al empleador que despide, tampoco opera como disuasivo frente a esta conducta ilícita".

Por otra parte, advierten que la posibilidad de que empleadores opten por contratar un sistema privado de capitalización para solventar la indemnización "podría propiciar la utilización fraudulenta de este modo de extinción contractual, encubriendo despidos sin causa bajo el formato de "retiros voluntarios" o acuerdos bilaterales que no lo son, violando el principio de irrenunciabilidad".

"Se busca un gran negocio financiero como las ART y las AFJP, invirtiendo fondos cautivos. El fondo de la Uocra es para una obra que empieza y termina, entonces durante el contrato el empleador aporta el 12% del trabajador. No creo que sea negocio para muchos empleadores porque les va a suponer un mayor costo si no piensan despedir a nadie sin justa causa", dijo Matías Cremonte, titular de la Asociación de Abogados Laboralistas de Latinoamérica.

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