Tras días de angustia y una desintoxicación urgente, el pequeño volvió a casa. La enfermera fue imputada y el hospital inició una auditoría interna.
Después de varios días de internación y una desintoxicación crítica, el bebé de un año que había sido inyectado por error con clonazepam en el Hospital General Las Heras de Tupungato recibió el alta médica. El caso, que conmocionó a la comunidad mendocina, derivó en una investigación judicial y en la imputación de la enfermera involucrada por el delito de lesiones culposas.
El episodio ocurrió el martes 24 de junio, cuando el niño -internado por un cuadro respiratorio- recibió una sustancia en la vía del suero que lo dejó en estado de somnolencia profunda. Minutos después, se descompensó y fue trasladado de urgencia al Hospital Notti, donde los estudios toxicológicos confirmaron la presencia de clonazepam en su organismo.
La recuperación fue lenta pero favorable. El pequeño permaneció varios días en terapia intensiva y luego fue trasladado a una sala común. Finalmente, esta semana recibió el alta médica, aunque continuará bajo observación y deberá someterse a nuevas pericias en el Cuerpo Médico Forense de Tunuyán.
La enfermera fue apartada de sus funciones y permanece en libertad, ya que el delito es excarcelable. Mientras tanto, el hospital inició una auditoría interna para determinar si hubo fallas en los protocolos de medicación. La familia del bebé exige respuestas y sigue de cerca el avance de la causa.
El caso reabre el debate sobre la seguridad en la administración de medicamentos pediátricos y la necesidad de reforzar los controles en los centros de salud públicos.