Para conseguir el aval, el Gobierno necesita tener contar con dos tercios de ambas cámaras.
Dos ministros del gabinete de Alfredo Cornejo justificaron este jueves en la Legislatura el proyecto de ley con el que el Gobierno busca la autorización de financiamiento externo por 160 millones de dólares para destinarlos a la modernización de la salud y la educación.
Los exponentes fueron Tadeo García Zalazar, ministro de Educación, Cultura, Infancias y Dirección General de Escuelas; y Rodolfo Montero, ministro de Salud y Deportes, respaldados por Víctor Fayad, ministro de Hacienda y Finanzas. Para conseguir el aval, el Gobierno necesita tener contar con dos tercios de ambas cámaras, por lo que deberá negociar con la oposición para que respalde la propuesta.
De contar con el aval en la Legislatura, este crédito se tomará con organismos multilaterales de créditos -Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF)-.
Aunque resta este aval legislativo, desde el Poder Ejecutivo aseguraron que ya están avanzadas las negociaciones con estos fondos de crédito.
En principio, el plazo de devolución del préstamo será de 20 años y contarán con un plazo de gracia de entre 2 y 5 años.
En el caso del sistema educativo, García Zalazar explicó que esa plata servirá para fortalecer el programa EDUTEC, orientado a digitalizar el aprendizaje en las escuelas mendocinas. El plan contempla la provisión de Aulas Digitales Móviles, la mejora de la conectividad en los establecimientos, la capacitación docente continua y la actualización de contenidos escolares.
"En dos años queremos equipar el 100% de las escuelas con tecnología, conectividad y capacitación", afirmó García Zalazar. Además, se prevé la incorporación de inteligencia artificial en la enseñanza secundaria y una articulación con escuelas privadas para facilitar el acceso a equipamiento a menores costos.
El programa educativo, que busca potenciar especialmente las áreas de Matemática, Lengua y Ciencias, prevé la adquisición de tecnología, licencias y herramientas digitales, además de robustecer los sistemas de gestión de la Dirección General de Escuelas. Para ello, el Ejecutivo solicitará un préstamo por 75 millones de dólares.
En paralelo, el Gobierno impulsa una reforma integral del sistema de salud mediante la transformación digital de todos los efectores públicos, para los que necesita 85 millones de dólares. El proyecto contempla la renovación completa de la infraestructura tecnológica, la interoperabilidad de sistemas clave como la historia clínica electrónica, telesalud, laboratorio, imágenes, prescripción electrónica, y gestión de medicamentos.
También incluye el desarrollo de tableros para la toma de decisiones, el fortalecimiento de la ciberseguridad y la capacitación del personal.
Para financiar esta transformación en salud, se solicitará un segundo crédito de 85 millones de dólares. Según el proyecto, el objetivo es avanzar hacia un sistema "más justo, resiliente, centrado en las personas y basado en el uso inteligente de la información".