En las últimas horas, las redes sociales se llenaron de rumores que afirmaban que una isla africana había pedido convertirse en provincia argentina. Sin embargo, la realidad es mucho más compleja: se trata de Annobón, una isla ubicada en el Golfo de Guinea, que busca el reconocimiento de su soberanía tras declararse independiente de Guinea Ecuatorial, país gobernado por la dictadura más longeva del mundo.

El Primer Ministro annobonés, Orlando Cartagena Lagar, salió al cruce de las versiones viralizadas y aclaró el verdadero sentido del mensaje que enviaron a la Cancillería argentina.

Todo comenzó con la difusión de una carta enviada al gobierno de Javier Milei, en la que el movimiento independentista annobonés solicitaba el reconocimiento diplomático de la República de Annobón. En el texto, se pedía también respaldo al respeto por la libertad, la democracia y la república.

Cartagena Lagar aclaró que el pedido no implica una solicitud de anexión ni de integración territorial a la Argentina. "Se trata de un llamado de auxilio político para que la isla deje de ser ignorada por la comunidad internacional", expresó.

"Agradecemos el cobijo que recibimos del pueblo argentino durante nuestra estadía. Aprovechamos para pedirle nuevamente al gobierno de Milei y a toda la dirigencia política que ponga sus ojos en la República de Annobón, que no permitan que el pueblo annobonés sea víctima de tanto sufrimiento", declaró el funcionario, quien visitó el país semanas atrás.

Y añadió: "Les pedimos solidaridad y, por sobre todas las cosas, el reconocimiento, que ojalá sea el reinicio de una hermandad que nunca debimos perder".

Annobón es una pequeña isla volcánica en el Océano Atlántico, que formalmente continúa siendo parte de Guinea Ecuatorial, gobernada desde 1979 por Teodoro Obiang Nguema Mbasogo. En 2022, luego de décadas de abandono y denuncias por violaciones sistemáticas a los derechos humanos, los habitantes de la isla proclamaron la independencia y crearon la República de Annobón.

El régimen de Obiang ha sido denunciado por organismos internacionales por la utilización de métodos represivos como torturas, secuestros, represión armada y censura total de las comunicaciones. Según Cartagena Lagar, la comunidad annobonesa vive aislada y hostigada.

En este contexto, el contacto con América Latina busca romper ese cerco. La isla apunta a establecer relaciones diplomáticas con países que defienden la autodeterminación de los pueblos y tienen tradición diplomática en el continente africano, como es el caso de Argentina.

Hasta el momento, no hay una respuesta oficial de la Cancillería argentina sobre el pedido de Annobón. Sin embargo, la difusión del caso a través de redes sociales y medios podría presionar al gobierno a pronunciarse.

Argentina mantiene una historia diplomática activa con África desde hace décadas, y un eventual respaldo -aunque simbólico- podría representar un impulso clave para la causa annobonesa.