Las imágenes del joven - que había sido padre hace poco más de un mes- impactaron a todos. Su particular y conmovedora despedida.
Gran conmoción en las redes sociales generó la muerte de Tanner Martin, un famoso influencer de 30 años. El joven se hizo famoso por documentar su enfermedad y posteriormente dejar pregrabado un video anunciando su propia muerte.
La muerte del influencer ocurrió 41 días después de que diera la bienvenida a su primer bebé, una niña, junto a su esposa Shay Wright, con quien comenzó a documentar su diagnóstico de cáncer colorrectal en noviembre de 2020.
En la grabación, compartida el último miércoles en su cuenta de Instagram muestra al influencer con su actitud característica: sonriente, cálido y con su particular sentido del humor. "Hola, soy yo, Tanner. Si estás viendo esto, estoy muerto", dijo, rompiendo la solemnidad del anuncio con una carcajada y bromeando sobre la situación.
A pesar de que su voz sonaba débil, el mensaje era claro: Tanner decidió grabar ese video después de ver a otra persona hacerlo, y vio en él una oportunidad para expresar sus pensamientos finales de una manera íntima y sincera.
Convencido de que había tenido "una vida increíble", usó su despedida para agradecerle a su comunidad por el apoyo recibido y preparar a sus seres queridos para el inevitable desenlace.
Según informó el diario británico Daily Mail, la batalla de Tanner contra el cáncer comenzó hace cinco años, fue en el 2020 cuando notó los primeros síntomas: simples dolores estomacales que se agravaron con el tiempo y lo llevaron finalmente a realizarse una colonoscopia.
El diagnóstico fue devastador: cáncer colorrectal en etapa 4, que ya se había diseminado a su hígado en el momento del hallazgo.
Tanner y Shay decidieron compartir abiertamente el proceso, narrando el avance de la enfermedad y las etapas del tratamiento con la comunidad de seguidores que los acompañó a lo largo del camino.
En 2023, los médicos confirmaron que el cáncer ya no era curable, y estimaron que podría tener entre dos y cinco años de vida restantes. La pareja eligió documentar tanto los momentos difíciles como las pequeñas victorias cotidianas, convirtiendo su perfil en redes sociales en un espacio de honestidad y reflexión sobre la vida, la enfermedad y la muerte.