En la F1 no se vive de sueños. Y Toto Wolff lo sabe. El objetivo del jefe de Mercedes desde que se anunció la marcha de Lewis Hamilton a Ferrari es hacerse con los servicios de Max Verstappen. Así lo ha hecho saber en varias ocasiones, a pesar de las negativas por parte del propio neerlandés y Christian Horner. Pero ahora hay un cambio de escenario.

Wolff sabe muy bien que para convencer a Verstappen, necesita ofrecerle un coche ganador. A principio de temporada parecía algo improbable, pero después de las últimas carreras, está claro que Mercedes vuelve a estar en la pomada. En Silverstone, de hecho, estuvieron por delante de Red Bull.

"Siempre he dicho que necesitamos un coche que vaya rápido y si tenemos un coche que va rápido, pondremos a un piloto en él y tendremos el interés de varios pilotos más. Creo que necesitamos seguir calmados y seguir con la temporada", manifestó Toto después del GP de Gran Bretaña.

De cara a los próximos grandes premios, Budapest y Spa, Mercedes traerá unas actualizaciones con las que esperan continuar con su progreso e ir incluso mejor que en Gran Bretaña, donde no esperaban tener un rendimiento tan bueno como el que mostraron, según asegura Wolff.

"En Austria, no estábamos demasiado lejos. Si miras la distancia antes del coche, eran dos décimas. Es lo más cerca que habíamos estado desde hace tiempo y en un circuito que no nos gustaba. Siendo sinceros, no esperábamos esto en Silverstone porque sólo introdujimos pequeñas cosas en el coche. Esperamos con más ganas Budapest o Spa. Tenemos motivos para pensar que lo que hacemos ahora es lo correcto", concluyó el director de Mercedes.

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