La cúrcuma es uno de los condimentos más utilizados en Oriente, pero además de su uso en la gastronomía tiene diversos beneficios para la salud. De acuerdo con Mary-Eve Brown, dietista y nutricionista de la Clínica de Oncología del Johns Hopkins Medicine puede proteger al cuerpo al neutralizar los radicales libres (contaminación y luz solar), y gracias a sus propiedades antiinflamatorias puede causar alivio a personas con padecimientos como la artritis, trastornos articulares, colitis e incluso alergias.

Por otra parte, el sitio Medical News Today señaló que la cúrcuma se puede tomar para prevenir o tratar el hígado graso no alcohólico, ya que gracias a la curcumina puede reducir la inflamación causada por este padecimiento.

¿Cómo consumir la cúrcuma para limpiar el hígado?

Si quieres consumir cúrcuma para limpiar tu hígado, puedes recurrir a complementos hechos a base de esta raíz que suelen venderse en cápsulas, o a tés y jugos que lo contengan. Una de las bebidas más populares con cúrcuma es la leche dorada a la que se le atribuye principalmente  reducir la inflamación abdominal.

También puedes preparar tus jugos favoritos con un trocito de cúrcuma. Por ejemplo, el jugo de betabel con cúrcuma y limón es una excelente opción para eliminar la grasa acumulada en el hígado.

No obstante, de acuerdo con la Dra. Brown, los suplementos pueden llegar a ser perjudiciales, debido a que pueden aumentar el riesgo de padecer cálculos renales, por lo que la experta recomienda consumir cúrcuma en tus alimentos, especialmente combinada con pimienta negra, ya que de esta forma aumentarás la capacidad del cuerpo para absorber sus beneficios.

La cúrcuma es segura para la mayoría de las personas, sin embargo, se recomienda que quienes quieran consumirla primero descarten el ser alérgicos a la especia, ya que en ese caso, puede provocar sarpullido, urticaria o dolor abdominal. (Terra)