"Recibimos una alerta en (el centro comercial) San Marino, que en un vehículo de un parqueadero se encontraba alojada una boa constrictora que estaba causando conmoción a la ciudadanía", relató Fran René Huilca, encargado del Departamento de Operaciones de la Unidad Nacional de Policía de Protección del Medioambiente (UPMA).

El funcionario contó que personal especializado de ese organismo se acercó al auto con sus elementos de manipulación y contención, y llevó a cabo el rescate para aliviar la tensión de quienes se encontraban en el lugar.

"Realizamos el rescate de este reptil, que fue trasladado al centro de rescate autorizado por el Ministerio de Ambiente, donde va a ser valorada y reintroducida a su hábitat natural", contó.

Huilca también dio cuenta de otro aviso similar en la parroquia de Chongón, también ubica en la ciudad de Guayaquil, y dijo que se llevó a cabo el mismo protocolo de "manipulación y contención".

"Acudimos al Chongón en donde constatamos una boa constrictor que se encontraba en las bodegas de un inmueble. Rápidamente se hizo su manipulación y se la trasladó a un centro de rescate", informó.

La sorpresiva aparición de una boa en un shopping

En el video que se viralizó en las redes sociales, se ve al reptil asomarse por detrás de una de las ruedas del auto, en el espacio entre la llanta y la carrocería.

Personal de la Unidad de Protección del Medio Ambiente (UPMA) se acercó lentamente al vehículo y cuando el animal apareció por encima del neumático lo tomó con firmeza con la mano por la cabeza, impidiéndole el movimiento, y retirándolo del lugar sin causarle heridas.

La Policía cree que la boa podría haberse infiltrado desde el motor, tras subirse a la estructura del auto en alguna zona de bosques y cerros que frecuenta su conductor a raíz de sus actividades laborales, según presumieron medios ecuatorianos.

"Estos rescates reflejan nuestro compromiso permanente con la protección y conservación de la naturaleza. Gracias a la participación de la comunidad, pudimos actuar con rapidez y garantizar el bienestar de estos animales", consideró Huilca.

Boa constrictora: una especie carnívora y no venenosa

Las autoridades recordaron que la boa constrictora no es venenosa, pero puede representar riesgos si se siente amenazada o si se encuentra en espacios reducidos. Se encuentran principalmente en las zonas tropicales de América Central y del Sur.

Según detalló National Geographic, "son excelentes nadadoras, pero prefieren quedarse en tierra firme y habitar especialmente troncos huecos y madrigueras de mamíferos abandonadas".

En comparación con las anacondas, indica la misma fuente, son más pequeñas: pueden alcanzar los 4 metros de largo y pesar más de 45 kilos.