En busca de la verdad
En busca de la verdad
El delincuente, con heridas en una mano y una pierna, acudió a pedir ayuda en una comisaría y terminó detenido.
En Córdoba, un ladrón ingresó en una casa de barrio El Cerrito y fue echado a machetazos por el dueño de la casa. Lo curioso ocurrió después, cuando el delincuente acudió a la Policía para cambiar la versión y relatar que él fue víctima de un robo.
El hecho ocurrió el viernes 25 de octubre a las 7 de la mañana. Los vecinos indicaron que todos se sorprendieron al ver al ladrón, y que rápidamente se agruparon para ahuyentarlo. El delincuente debió escapar por una ventana.
Su huida le dejó secuelas: el ladrón sufrió heridas y cortes en la mano izquierda y en la pierna derecha. Horas más tarde, fue hasta la comisaría 47, a cinco cuadras de la casa en la que había ingresado, y se presentó como víctima de robo. Sin embargo, los policías lo identificaron y quedó detenido.
Tras ser asistido por un servicio de emergencias, el hombre fue puesto a disposición de la Justicia, sin necesidad de que fuera trasladado a un hospital.
Un brutal asesinato tuvo como víctima a una mujer de 41 años, madre de tres hijos, en Villa Martínez, en la ciudad de Córdoba. El hecho ocurrió hace una semana cuando intentó impedir que un grupo de jóvenes prendiera fuego su auto y fue atacada a balazos.
Guadalupe del Valle Balmaceda estaba en su domicilio ubicado en la intersección de las calles Filiberto de Mena y Luis Agote, cuando cerca de las 23 su pareja, Manuel Juárez, le dijo que el Renault 12 estacionado al frente de la vivienda estaba envuelto en llamas.
En un intento desesperado por impedir el salvaje ataque, salió a increpar a los tres agresores, que según las primeras averiguaciones serían vecinos de la zona. Sin embargo, la respuesta que recibió fue letal: le dispararon tres veces, pegándole dos tiros en la espalda y uno en la boca.
Al escuchar los impactos, Juárez salió a socorrer a su pareja. Los atacantes escaparon pero antes lo amenazaron de muerte a él y al resto de su familia. El hombre apagó el incendio y llevó a Balmaceda al hospital Eva Perón, ubicado a pocos kilómetros de su casa. Al ingresar al centro de salud, la víctima ya estaba inconsciente y, a pesar de los esfuerzos médicos por reanimarla, lamentablemente murió.
