La institución inglesa, actualmente en el puesto 13 de la Premier League, se encuentra apenas a siete puntos de la zona de descenso, un panorama que enciende alarmas en Old Trafford. Además, las finanzas del equipo no acompañan: en el último mercado de pases, el club gastó 221 millones de euros en refuerzos, mientras que los ingresos por ventas apenas alcanzaron la mitad de esa cifra. Esto generó un déficit que, sumado a las estrictas reglas de rentabilidad y sostenibilidad de la liga inglesa, pone al Manchester en una posición delicada.

El extremo argentino, que esta temporada lleva ocho goles y cuatro asistencias, fue una de las piezas fundamentales del equipo, especialmente en partidos cruciales. Su desempeño en el reciente empate ante Liverpool, donde ingresó desde el banco y fue decisivo en el gol que permitió al United sumar un punto, refuerza su importancia en el plantel. Sin embargo, la crisis económica podría obligar al club a sacrificarlo y buscarle un nuevo rumbo en su carrera.

El panorama no es alentador para el equipo dirigido por Ruben Amorim, quien recientemente admitió que "el descenso es una posibilidad". El United deberá enfrentarse este domingo al Arsenal por la tercera ronda de la FA Cup, y el jueves 16 recibirá al Southampton en un partido clave para sus aspiraciones en la Premier League.

Mientras tanto, el futuro de Garnacho sigue siendo incierto. Con solo 19 años, el futbolista argentino podría cambiar de equipo en el próximo mercado de pases, dependiendo de las ofertas que lleguen y de las decisiones que tome la directiva del club.

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