María Corina Machado acababa de dar el discurso con el que rompió 133 días de clandestinidad en Venezuela, una situación a la que la arrinconó el régimen de Maduro con la inhabilitación electoral y la persecución política. Acababa de hablar con los cronistas, en una improvisada rueda de prensa, aún sobre el techo de la camioneta desde la que habló a sus seguidores. Ya estaba arriba de una moto, con ropa oscura y casco. En ese momento, con el clima caliente de días agitados y tensos, el chavismo cerró el cerco y en un operativo violento secuestró a la principal dirigente opositora en Caracas.

Machado reapareció en El Chacao, norte de Caracas. Emergió de la multitud y habló a sus seguidores en medio de un gran despliegue militar que asedió la manifestación. Después, la secuestraron agentes de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM), la misma fuerza que detuvo a Nahuel Gallo, el gendarme argentino.

Por la tarde, pasadas las 15, ya estaba dando un enérgico discurso, cuando la oposición comenzó a denunciar vía redes sociales que el régimen de Nicolás Maduro asediaba las manifestaciones, con especial ahínco en aquella en que participaba Machado.

Altoparlantes con música a altísimo volumen que competían con los que transmitían, desde la calle, el discurso de Machado. Todos estaban cercados por columnas de militares y una retahíla de agentes de la Policía Nacional Bolivariana, por patrulleros, motos y hasta drones.

La periodista local Carla Angola precisó, en su cuenta de X: "El régimen secuestró a María Corina. 17 motos, drones y camionetas jeep dispararon a las motos que la trasladaban, los tumbaron, hirieron a uno de los motorizados y se lo llevaron junto a ella".

Según el propio entorno de Machado, fue interceptada de forma violenta y hubo disparos contra los motociclistas. Uno de ellos habría terminado herido.

Otras fuentes, como el medio local La Patilla, uno de los que tratan de saltar el cerco informativo del régimen, sindican a la Dirección General de Contrainteligencia Militar el secuestro de la líder opositora venezolana. En nuestro país, esta fuerza del gobierno de Maduro es conocida por haber sido, según informaron las propias fuentes oficiales, la que detuvo al gendarme argentino Nahuel Gallo, que desde diciembre pasado continúa en prisión acusado de terrorismo.

Este viernes es la fecha estipulada para la ceremonia de toma de posesión de la presidencia de Venezuela, que nuevamente se arrogó Nicolás Maduro, luego de las elecciones del pasado 28 de julio, bajo un manto de notorias irregularidades. También Edmundo González Urrutia, presidente electo, prometió aparecer en Caracas este viernes para su asunción. Sobre él recae un pedido de captura que emitió el régimen de Maduro.