Todos tenemos semanas en las que no nos sentimos en nuestro mejor momento. El estrés, las enfermedades, un dolor y el ajetreo de la vida cotidiana son factores que pueden afectar a el apetito y la forma en que el cuerpo regula el hambre.
Eso nos lleva a comer mal, desordenado y a menudo menos de lo que debemos, por eso es importante fijarse en estas señales que demuestran que no estás comiendo suficiente.
1- Baja energía
Si te has estado sintiendo completamente agotado durante varias semanas y te resulta cada vez más difícil levantarte de la cama sin importar cuanto duermas o la calidad de tu sueño, evaluá tu alimentación. Es posible que si no estás consumiendo suficientes calorías o la densidad adecuada de energía de los alimentos, entonces probablemente vas a sentir baja energía en algún momento.
Las mujeres deben consumir alrededor de 1.600-2.400 calorías diarias (dependiendo de la edad y actividad física) y los hombres entre 2.000-3.000. Esto son solo pautas, por lo que, si llevás un estilo de vida muy activo y hacés ejercicio con frecuencia, es posible que debas consumir más calorías que el promedio.
También hay que ser consciente de la calidad, no de la cantidad de calorías que estás consumiendo. Alimentar el cuerpo con proteínas de calidad, carbohidratos complejos y grasas saludables te ayudará a aumentar los niveles de energía acelerando tu metabolismo.
2- Mareos
Cuando no estás comiendo suficiente, los niveles de azúcar en sangre pueden caer en picada y hacer que te sientas mareado o desmayarte. Los mareos también pueden indicar que estás deshidratado, por lo tanto, tomar suficiente agua durante todo el día es imprescindible.
3- Pobre cognición y productividad (lagunas mentales)
Esto nos sucede a todos pero la laguna mental frecuente podría ser la forma en que tu cuerpo te está diciendo que no te estás nutriendo adecuadamente. Puede ser un signo de varios problemas de salud, pero lo más común es un alto estrés o no comer suficientes nutrientes y con una rutina para que tus niveles de energía (azúcar en la sangre) permanezcan estables. Posponer almuerzos o interrumpir los horarios normales de comida para asistir a reuniones o atender llamadas retrasa la energía que tu cuerpo necesita para seguir.
4- Pérdida de pelo y uñas quebradizas
Si no estás comiendo suficiente o no estás obteniendo suficientes nutrientes, los órganos de mayor prioridad tomarán la iniciativa para obtenerlos, como tu cerebro, corazón, etc. El cuidado del cabello, piel y uñas está estrechamente relacionado con lo que uno come, la cantidad de minerales, grasas saludables, proteínas y nutrientes generales que tu cuerpo absorbe.
Es normal perder entre 50 y 100 hebras de pelo todos los días, pero si estás perdiendo más de lo normal y tus uñas parecen romperse más fácilmente, centrate en nutrir tu cabello y uñas desde tu interior hacia afuera y comé alimentos que ayuden a producir más queratina, la proteína que fortalece estas partes.
5- Estado de ánimo irritable
Si estás luchando contra un día ocupado y tenés que salir corriendo sin desayunar, tu nivel de azúcar en la sangre baja y tu estado de ánimo también. Los niveles bajos de glucosa pueden causar agresión y comportamiento violento además de dolores de cabeza, migrañas, aturdimiento y náuseas.
Comé de un modo regular e ingerí alimentos saludables. Disfrutar de comidas te ayudará a mantener el azúcar en la sangre estable, por lo que te mantendrás en el buen camino de un estado de ánimo positivo, buena energía y sintiéndote centrado.