El Ferrari 250 GTO de 1962 es considerado el santo grial de los autos clásicos, tanto por su exclusividad como por su valor histórico y estético. Fabricado entre 1962 y 1964, solo existen 36 unidades en el mundo, lo que lo convierte en un objeto de deseo para coleccionistas y amantes del automovilismo.

En noviembre de 2023, un ejemplar de este modelo fue subastado en Sotheby"s, Nueva York, alcanzando un precio de 51,7 millones de dólares, convirtiéndose así en el segundo automóvil más caro vendido en una subasta pública, solo superado por el Mercedes-Benz 300 SLR Uhlenhaut Coupé. Este Ferrari 250 GTO, con chasis 3765, fue el único de la Serie I que permaneció en propiedad de la fábrica antes de pasar a manos privadas, y su historial en competición incluye una destacada participación en las 24 Horas de Le Mans y en el circuito de Nürburgring.

El valor de estos modelos sigue en ascenso, y se estima que, dependiendo del estado y la historia de cada unidad, el precio de un Ferrari 250 GTO puede superar los 60 millones de dólares en futuras subastas. Esta cifra refleja no solo la rareza y el pedigrí deportivo del modelo, sino también su estatus como obra de arte sobre ruedas y símbolo máximo de la ingeniería italiana.

En definitiva, el Ferrari 250 GTO no solo es un clásico de Maranello, sino también una de las inversiones más codiciadas y valiosas en el mundo del automóvil de colección