Comer almendras a diario es una excelente forma de saciar el hambre y así no caer en la tentación de picar entre horas.
La Federación Española de Nutrición (FEN) recalca que las almendras son ricas en nutrientes esenciales al contener proteínas, fibra, ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, así como una amplia variedad de vitaminas y minerales. Entre estos últimos, hay que destacar su contenido en calcio, zinc, potasio, fósforo, hierro, vitamina E, niacina, folatos, tiamina y riboflavina.
Comer almendras a diario es una excelente forma de saciar el hambre y así no caer en la tentación de picar entre horas. Gracias a su elevado contenido en fibra y proteínas, estos frutos secos proporcionan sensación de saciedad, por lo que ayudan a controlar el apetito y, por tanto, a mantener un peso saludable. Por su parte, su elevado contenido de fibra hace que sea un alimento ideal para mejorar la salud digestiva y combatir el estreñimiento.
Las grasas monoinsaturadas que están presentes en este fruto seco también tienen beneficios cardiovasculares porque contribuyen a mantener bajo control el colesterol, haciendo que se encuentre dentro de un rango saludable y, por ende, reduciendo el riesgo de que se padezcan enfermedades cardíacas.