Sociedad Historia de vida

Después de cinco años, Pablito Viajero llegó a Alaska

Es el aventurero argentino que atravesó América con una Honda EconoPower. La aventura completa de Pablo Imhoff.


Martes, 15 de Julio de 2025

El aventurero argentino Pablo Imhoff, más conocido como "Pablito Viajero", cumplió ayer su sueño de unir Ushuaia con Alaska, en una travesía que lo llevó a recorrer más de 50 mil kilómetros a través de 15 países de América en una Honda C90 EconoPower de 1992.

Oriundo de Santo Tomé (Santa Fe), Imhoff completó así su "Proyecto Alaska": una aventura que comenzó el 14 de enero de 2020 y finalizó ayer, 14 de julio de 2025. Imhoff, de 37 años, dejó atrás una vida convencional en 2014, cuando a los 27 renunció a su trabajo como óptico contactólogo en Rosario, vendió sus pertenencias y canceló el contrato de alquiler de su departamento, para embarcarse en una travesía que marcó el inicio de su vida como viajero. Su primera gran travesía, "La Vuelta a la Argentina en Gilera", lo llevó a recorrer las 23 provincias de nuestro país y las Islas Malvinas durante tres años y cuatro meses, sobre una Gran Turismo 200 de 1970. Su experiencia se plasmó en el libro "Vuelta a la Argentina en Gilera - Volumen I".


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 El "Proyecto Alaska" nació como un desafío aún más ambicioso: cruzar el continente americano de Sur a Norte en una moto de baja cilindrada. Imhoff partió desde Santo Tomé hacia Ushuaia, donde inició oficialmente su recorrido en marzo de 2021, tras quedar varado un año en Tierra del Fuego por la pandemia del Coronavirus. Durante ese tiempo, aprovechó para explorar Ushuaia y sus alrededores, convirtiéndose en un "Especialista del Fin del Mundo", según sus propias palabras.

Con su Honda C90, apodada cariñosamente "Econo", Imhoff recorrió la mítica Ruta 40 de punta a punta, desde Cabo Vírgenes hasta La Quiaca, antes de cruzar a Bolivia y continuar por Sudamérica, Centroamérica y Norteamérica. Su travesía incluyó paisajes tan diversos como el Salar de Uyuni en Bolivia, el túnel La Llorona en Colombia y las rutas de México. Entre los desafíos enfrentados, destacó la negativa de ingreso a Nicaragua en 2023, lo que lo obligó a enviar su moto por camión desde Costa Rica a Honduras, mientras él viajaba en avión.

A lo largo del viaje, Imhoff documentó cada etapa en su canal de YouTube, donde cuenta con más de 1.5 millones de suscriptores. "La moto es el equilibrio perfecto: te da la libertad de una bicicleta, pero la potencia de un vehículo grande", explicó Imhoff desde Costa Rica en 2023. Su elección de una moto de 90cc, modificada con alforjas de cuero, un baúl de madera y una toma de 12 voltios, refleja su filosofía de "viajar ligero" y en contacto directo con la naturaleza.

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El viaje no estuvo exento de dificultades. En Bolivia, Imhoff enfrentó condiciones extremas en el Salar de Uyuni, donde celebró su cumpleaños número 35 acampando bajo las estrellas. En Jujuy sufrió la inclemencia del tiempo, al descender los 4.000 metros de El Angosto bajo lluvia y viento huracanado. Además, en Colombia tuvo que negociar un costoso paso de su moto a Panamá, donde sintió que intentaron aprovecharse varias veces de su condición de turista.

A pesar de los obstáculos, Imhoff destaca las conexiones humanas como lo más valioso de su aventura: "Lo que me llevo son las experiencias con la gente, las amistades, los recuerdos, la buena onda", afirmó en una entrevista. Su viaje, que lo llevó por países como Chile, Perú, Colombia, Costa Rica, Honduras, Guatemala, Belice, México, Estados Unidos y Canadá, es también un testimonio de perseverancia y superación.

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Imhoff anunció ayer su llegada a Alaska a través de un emotivo mensaje en redes sociales: "¡Gracias a todos los que formaron parte de este sueño!". Aunque no especificó el punto exacto de llegada, había expresado su deseo de alcanzar Prudhoe Bay, el lugar más al norte accesible por carretera en Alaska. "Fue la mejor decisión de mi vida", reflexionó Imhoff sobre su elección de dejar todo para viajar. Su historia, que inspira a miles de seguidores, demuestra que con pasión y determinación, los sueños más grandes pueden hacerse realidad, incluso sobre dos ruedas y con solo 90 centímetros cúbicos