La derrota del peronismo en las elecciones legislativas del domingo 26 de octubre abrió una nueva etapa de disputas internas. En ese marco, Héctor Daer, uno de los secretarios generales de la Confederación General del Trabajo (CGT), apuntó directamente contra la expresidenta Cristina Kirchner por las imágenes que la mostraron bailando en el balcón de su búnker tras conocerse los resultados electorales.

El líder de FATSA, quien siguió el escrutinio desde La Plata, expresó su sorpresa y rechazo a la actitud de la exmandataria.

"Una es saludar y otra cosa es bailar. Me parece que no le cayó bien a nadie. A mí me sorprendió... cuando me dijeron 'Cristina está bailando en el balcón', la verdad que no lo podía creer. Porque aparte considero que Cristina es una persona inteligente, o midió mal el saludar a la gente que la fue a ver o no sé", sostuvo Daer en Radio Con Vos.

Consultado sobre si la actitud podía ser vista como una provocación dentro de la interna peronista, Daer desestimó esa lectura, aunque insistió en la inoportunidad del gesto. "Estábamos perdiendo la elección. Por ahí, la interpretación del baile no es la correcta y es la forma de ella de saludar, nada más", agregó el sindicalista.

Daer también se refirió a la estrategia del gobernador bonaerense, Axel Kicillof, de desdoblar los comicios provinciales del 7 de septiembre (donde Fuerza Patria ganó) de la elección nacional del 26 de octubre (donde ganó Diego Santilli). El dirigente sindical defendió enfáticamente la decisión. "Gracias al desdoblamiento, garantizamos los consejos del Deliberante, garantizamos el poder territorial en la provincia de Buenos Aires. Si no se hubiera desdoblado, nos hubiese pasado como a Pullaro, a Schiaretti o a Nacho Torres".

El sindicalista reconoció que el peronismo no dio el debate necesario en la contienda nacional, lo que llevó a la derrota, y enfatizó la necesidad de "observar la realidad que es la que no se puede dar vuelta".

Tras el triunfo de La Libertad Avanza, el Gobierno de Javier Milei ya adelantó que impulsará un paquete de reformas estructurales, siendo la reforma laboral uno de los temas centrales a debatir con la nueva composición del Congreso.

Finalmente, Daer no descartó medidas de fuerza extremas si las negociaciones parlamentarias no son suficientes: "Si eso no alcanza, generar presión gremial, como lo hicimos cuando nos metieron el DNU 70", enfatizando que podría haber "paros y movilización" si las reformas atentan contra los derechos laborales.