En su primera aparición pública tras el fallo de la Corte Suprema que dejó firme la condena a Cristina Fernández de Kirchner en la causa Vialidad, el diputado nacional Máximo Kirchner expresó un fuerte repudio a la decisión judicial y reflexionó sobre el futuro político del peronismo bonaerense. También aprovechó para enviar una señal a la interna con el gobernador Axel Kicillof, quien aún no definió su rol en el armado de listas de cara a las elecciones legislativas.

"Estas no son reglas del juego. Hay un acostumbramiento a una forma de funcionamiento corrosiva", sostuvo el presidente del PJ de la provincia de Buenos Aires en diálogo con Gustavo Sylvestre por C5N, al referirse a lo que considera una "persecución política" contra la ex mandataria. Según dijo, Cristina "está muy firme" y mantiene su compromiso con la ciudadanía.

Aunque sin mencionarlo directamente, Máximo Kirchner cuestionó a Axel Kicillof por no reconocer, según él, el rol histórico de CFK en el armado político del peronismo. "Hay sectores que tienen que reconocer lo hecho por la figura de Cristina. Si uno se sienta a una mesa y solo espera reconocimiento, es muy complejo", disparó. Y agregó: "La trama que debe eludir la dirigencia son esas vanidades y esos egos. Son una mochila muy pesada sobre la espalda y te terminan doblando".

También denunció "ruido de llaves" en la dirigencia, en alusión a la falta de compromiso de algunos sectores: "Muchos hablan de la democracia, pero a la primera cosa que no les gusta, tocan los tarros y se van".

En el marco del debate interno por el cierre de listas en la provincia, especialmente tras la imposibilidad legal de que Cristina Kirchner encabece una candidatura en la Tercera Sección Electoral, el diputado remarcó que lo importante es saber "quién va y qué va a hacer, qué va a votar y qué no".

El jefe del PJ bonaerense también se refirió a la figura de su madre, a quien describió como "una voz que analiza y lee como nadie". Y criticó a aquellos que toman decisiones políticas basadas solo en encuestas: "Hay dirigentes que agarran un focus group y con eso arman agenda. No hay capacidad de hacer agenda propia".

En cuanto a la posibilidad de liderar el peronismo de cara al futuro, fue tajante: "En 2014 dije que no hay apellidos milagrosos. Ni el mío ni ninguno. Tiene que haber vocación de trabajo. No te atribuye virtudes por sí solo tener un apellido".

Finalmente, llamó a recomponer el vínculo entre la política y la sociedad: "Tenemos que lograr que la gente se interese por su destino, invitarla a soñar. No se trata solo de llegar a la Rosada, sino de cómo se transita y cómo te lo reconoce la gente".