El ministro de Justicia afirmó que en la actualidad el máximo tribunal "se da maña" para sacar fallos llamando a conjueces.
El ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, confirmó este martes que el Gobierno analiza un proyecto para ampliar la Corte Suprema de Justicia de la Nación de cinco a siete miembros. Así lo expresó durante su participación en el AmCham Summit 2025, organizado por la Cámara de Comercio de Estados Unidos en Argentina.
"Lo ideal es que esté la Corte completa. Se está estudiando la ampliación, hay un proyecto del senador (Juan Carlos) Romero pidiendo una ampliación a siete jueces", afirmó el funcionario. Y agregó: "Yo hace mucho que digo que, en mi opinión académica, no es para descartarlo. Pero está en estudio".
Cúneo Libarona señaló que, actualmente, la Corte "se da maña" para fallar llamando a conjueces, aunque consideró que lo ideal sería contar con un tribunal plenamente constituido.
La iniciativa a la que hizo referencia el ministro es un proyecto presentado por el senador salteño Juan Carlos Romero, luego del reciente rechazo en el Senado de los pliegos de Ariel Lijo y Manuel García-Mansilla, propuestos por el Gobierno para ocupar vacantes en el máximo tribunal.
El texto propone modificar el artículo 21 del Decreto Ley N° 1285/58 para establecer que la Corte esté compuesta por siete jueces, y que no más de cinco de sus integrantes pertenezcan al mismo sexo. También introduce criterios de representación regional, con el objetivo de ampliar el carácter federal del tribunal.
Romero argumenta que una Corte más numerosa permitiría mejorar la capacidad de resolución, además de aportar mayor legitimidad y diversidad en la composición del máximo órgano judicial del país.
No es la primera vez que Cúneo Libarona se muestra a favor de esta posibilidad. En declaraciones previas, ya había expresado su deseo de una "Corte ampliada, armónica y justa". "Me encantan los jueces que están. Creo que hay más jueces de primera para integrar un muy buen máximo tribunal ampliado", había manifestado.
Hasta el momento, no se han dado precisiones sobre los plazos o pasos concretos que podría seguir el Gobierno en relación a este posible cambio en la Corte Suprema. La iniciativa, de avanzar, requerirá respaldo legislativo en un Congreso con representación dividida y tensiones políticas cruzadas.