Policiales Violencia

Rosario sangra: dieron detalles de cuánto cobraron los sicarios para matar a los taxistas, al colectivero y al playero

El fiscal Patricio Saldutti aseguró que los homicidios fueron "para causar conmoción pública". Además, confirmó la participación de menores de edad, que fueron contratados ya que no podían ser arrestados por ser inimputables.

Martes, 16 de Abril de 2024

En las últimas horas la Justicia santafesina dio a conocer los montos que recibieron los sicarios que cometieron los crímenes de dos taxistas (Héctor Raúl Figueroa y Diego Alejandro Celentano), un colectivero (Marcos Iván Daloia) y un playero (Bruno Bussanich) en Rosario.

Según informó el propio fiscal Patricio Saldutti, los asesinos cobraron entre 200 y 400 mil pesos para cometer los crímenes. 

En total hay seis personas imputadas, entre las que se encuentra un viejo conocido del delito, Alejandro Isaías Núñez, más conocido como "Chuky Monedita". Además, aparecieron otros nombres de mucho peso en el ámbito delictivo: Claudio "Morocho" Mansilla y Esteban Lindor Alvarado.

"Chuky Monedita" está detenido en la cárcel de Piñero -donde cumple condena por homicidio y prisión preventiva por otros expedientes- y fue imputado hoy por los fiscales Patricio Saldutti, Franco Carbone y Adrián Spelta por instigar los crímenes de los dos taxistas y además ordenar la balacera a la Comisaría 15°. La Justicia lo apuntó de usar, mediante terceros, a adolescentes sicarios que no puedan ser arrestados por ser menores.

"Monedita" le habría encomendado el macabro plan a su pareja, Brenda Pared, quien se encuentra con prisión domiciliaria por una causa relacionada a las drogas. 

De acuerdo a la imputación, Brenda fue quien se habría encargado de distribuir las armas a los sicarios, junto a cómplices como Macarena Muñoz y su pareja, Gustavo Márquez, que reclutaron a dos menores para matar a sangre fría a los taxistas. Estos últimos habrían cobrado 300 mil pesos por el ataque a Figueroa, mientras que por el homicidio de Celentano habrían cobrado 200 mil pesos.

Días atrás, un testigo de identidad reservada afirmó ante la Justicia de menores que quien mató al taxista Celentano fue el mismo que asesinó al playero Bussanich y al taxista Figueroa.

El primero de los crímenes ocurrió a principio de marzo en el cruce de calles Flammarión y Lamadrid. Allí asesinaron a Héctor Figueroa, de 43, que iba en su taxi cuando un supuesto pasajero le disparó dos veces en la cabeza. 

Horas después mataron a otro taxista, identificado como Diego Alejadro Celentano, de 32 años. Lo encontraron en el interior de su auto con al menos un disparo en la cabeza, en la intersección de las calles Marcelo T. de Alvear y Garmendia.

Sólo tres días después, fue asesinado mientras trabajaba el colectivero Marcos Iván D"Aloia, de la línea K del trolebús.

El asesinato del playero Bruno Bussanich ocurrió al día siguiente del ataque a D´Aloia, en una estación ubicada en Mendoza al 7600. Un sicario armado entró a la oficina del lugar y disparó tres veces contra el joven que estaba trabajando.