Rosario registró un nuevo récord: 236 homicidios bajo la sombra de "Los Monos"
La tercera ciudad más poblada del país enfrenta una crisis de seguridad pública, que tiene como protagonista al jefe de la banda "Los Monos", Ariel "Guille" Cantero, quien desde la cárcel sigue liderando la venta de drogas y el delito organizado en la región.
Martes, 4 de Enero de 2022
Una vez más, Rosario mostró la cara más violenta del fenómeno narcocriminal del país: el año que acaba de finalizar, esta ciudad santafesina superó el número de asesinatos del último lustro al contabilizar 236 homicidios, registró decenas de balaceras contra edificios públicos y privados como método de amenaza y extorsión, y el jefe de la banda "Los Monos", Ariel "Guille" Cantero, sumó otras dos condenas y acumula penas por 96 años de prisión, aunque todo indica que desde la cárcel sigue liderando la venta de drogas y el delito organizado en la región.
La crisis de seguridad pública que persiste en la tercera ciudad más poblada del país provocó en dos años el cambio de seis cúpulas policiales y consumió la gestión del primer ministro del área del gobernador Omar Perotti, Marcelo Sain, quien renunció en marzo pasado en medio de una disputa con la oposición política.
También motivó la intervención del Gobierno nacional, que en marzo envió 300 efectivos federales a la ciudad y en octubre, cuando asumió el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, reforzó con otros 575 gendarmes y la creación de unidad fija en la ciudad.
El departamento Rosario registró, hasta el 15 de diciembre último, 236 homicidios, una cifra que supera el récord de 2015, que según las estadísticas del Observatorio de Seguridad Pública de Santa Fe había alcanzado a 234 víctimas.
La misma fuente indica que más del 60 por ciento de esos crímenes (141) tuvieron como contexto la "economía ilegal y las organizaciones criminales".
Una investigación conjunta entre la Agencia de Criminalidad Organizada, fiscales federales de Rosario y la Procunar (Procuraduría contra la Narcocriminalidad), puso en evidencia cómo "Los Monos" coparon a sangre y fuego la venta de drogas en un barrio cuyo control lo ejercía el jefe de la otra banda importante de la ciudad, la liderada por Esteban Lindor Alvarado, también preso desde febrero de 2019.
Según esa investigación, entre mediados de 2020 y septiembre de 2021 se registraron en barrio Godoy 23 balaceras y 12 homicidios.
Cuando los pesquisas pusieron la lupa sobre ese territorio descubrieron que otro preso, Pablo Nicolás Camino, había decidido correr del barrio a los tiros a la gente de Alvarado, por orden de "Guille" Cantero y de otro detenido, Leandro "Pollo" Vinardi.
"Por orden de Vinardi y Cantero, (Camino) ejecutó la puesta en marcha de una organización criminal integrada por distintas personas que bajo sus directivas llevaron a cabo la comisión de diversos delitos, entre los cuales podemos destacar conductas vinculadas al tráfico de sustancias estupefacientes, homicidios, extorsiones, amenazas y abusos de armas en el barrio Godoy", dice el dictamen de la Procunar.
Una investigación judicial sobre un grupo criminal de Rosario liderado por un preso que actuaba por órdenes de "Los Monos" revela la violencia empleada en la disputa territorial por la venta de drogas, que quedó registrada en una escucha donde el detenido amenaza a sus competidores: "En ese barrio mando yo, y ahí me paro de manos".
La escucha forma parte de una causa originada en 23 balaceras y 12 homicidios ocurridos durante un año en el barrio Godoy de Rosario, en el que el jefe de "Los Monos", Ariel "Guille" Cantero, buscaba desplazar en la venta de drogas a quien controlaba ese territorio, el narco también preso Esteban Lindor Alvarado.
De acuerdo a la causa, con ese fin Cantero ordenó a otro preso por homicidio, Pablo Nicolás Camino, que "copara" el barrio.
Gabriel Martínez, alias "Gavilán", una tercera línea del grupo de Alvarado, recibió una nota amenazante: "Comunicate o si no vamos hablar de otra manera, vos el del BMW negro, el amigo del gavilán".
En un diálogo con otra persona, identificada como Fernando Leyria, Martínez acusó recibo de la amenaza: "Si me llegan a hacer los vivos acá en mi casa o algo, y allá agarro para la mierda con el Tite, con toda la familia del Tite, la hago corta. Me llegan a tocar mi familia yo le mato todo a ellos", dice una escucha del caso.
En otra conversación, Leyria le dice a su interlocutor que tiene que averiguar "en qué pabellón (de la cárcel) está" Pablo Camino, que es quien le había pedido que pagara para vender drogas en barrio Godoy.
"Sino, tengo que averiguar dónde vive la familia de él y le mato toda la familia, que se joda, que se compre una nueva", continúa Leyria.
Antes, desde la cárcel santafesina de Piñero, Camino le había enviado un audio: "Vos y Gabi me van a pagar, así de corta. Si no, lo voy a recagar a tiros hasta que se vayan del barrio", dice, y sigue: "Deja de hacerte el pillo conmigo, porque te juro que te voy a entrar a tu casa y te voy a cagar matando, hijo de puta. Te voy a hacer la más loca… Te voy a hacer la engaña pichanga y te voy a matar… por gil".
Según las escuchas, Camino les exigía dinero a cambio de seguir vendiendo drogas en el barrio: "Vamos a llegar a un numerito y me van a tener que pagar vos y Gabi, corta. No te metas tirando contactos, línea, ni nada de esas cosas. Porque en ese barrio mando yo, y ahí me paro de manos".