Se trata de Mauricio Martín Morales, detenido la semana pasada. Quedó alojado en una unidad penitenciaria a la espera de estar frente a la fiscal del caso.
Policías trajeron anoche a un penal provincial de nuestra provincia a Mauricio Martín Morales, el hombre detenido en San Juan, acusado de estafar a estudiantes y a sus familias con la organización de su fiesta de egresados. Quedó alojado en la Estación Transitoria de Detenidos y Aprehendidos (ES.TRA.D.A). El traslado se concretó luego de que un juez autorizara la medida y estuvo a cargo de una comisión de la División de Delitos Económicos de Investigaciones.
El sospechoso había sido capturado el jueves pasado por la tarde en la vecina provincia, donde fue localizado tras varios días de tareas de inteligencia. Efectivos mendocinos habían viajado ante la sospecha de que Morales se encontraba allí, dato que fue confirmado luego por seguimientos y registros de cámaras de seguridad.
Morales está señalado como uno de los principales responsables de la firma Ok Catering, Eventos & Egresados MDZ, denunciada por incumplimientos contractuales en la organización de fiestas de fin de curso. Sobre él pesaba un pedido de captura impulsado por la fiscal Susana Muscianisi, a cargo de la instrucción.
La comisión policial partió hacia San Juan en las últimas horas, una vez que la Justicia dio el aval formal para el traslado. El regreso a Mendoza se produjo después de las 22, cuando el acusado fue ingresado a la unidad penitenciaria y quedó a disposición del Ministerio Público.
Ahora, el objetivo de la fiscal del caso es avanzar rápidamente con la imputación. Según indicaron fuentes judiciales, la audiencia podría realizarse durante la jornada de este miércoles o, a más tardar, el jueves, dependiendo de los tiempos procesales y de la incorporación de las últimas actuaciones al expediente.
La causa se originó tras una serie de denuncias de padres y estudiantes que habían contratado a la empresa para una fiesta de egresados prevista para el 29 de noviembre. Cada alumno había abonado montos significativos por la tarjeta y el baile, pero el evento fue cancelado de manera repentina y sin explicaciones claras.
En aquel momento, la firma envió un único mensaje de WhatsApp en el que pidió disculpas y atribuyó la suspensión a "circunstancias ajenas a su voluntad". Tras ese contacto inicial, no hubo nuevas respuestas, lo que generó un fuerte malestar y motivó la presentación de las denuncias penales.
La pesquisa avanzó con allanamientos en Ciudad y Guaymallén, domicilios vinculados a Morales. En uno de ellos, los policías encontraron equipamiento, documentación y elementos relacionados con la organización de eventos, además de irregularidades sanitarias que derivaron en la intervención de personal de Bromatología.
Con esos elementos, de acuerdo con fuentes judiciales, la fiscalía busca determinar si se trató de simples incumplimientos contractuales o si las maniobras atribuidas al empresario configuran un delito de estafa. En el expediente ya se incorporaron contratos, comprobantes de pago y testimonios de las familias afectadas.