La Corte le había dado 3 años por abusar de un menor en 2017. Y un Tribunal de Impugnación, 10 años de cárcel por otro abuso contra otro chico, el mismo año. Ese fallo fue revisado y confirmado ayer.
Los jueces de la provi8ncia de San Juan, Maximiliano Blejman, Ana Lía Larrea y Renato Roca (Tribunal de Impugnación) confirmaron ayer la condena de 10 años de cárcel que, por mayoría, le impusieron al sacerdote Walter Bustos el 8 de octubre pasado, los magistrados Silvina Rosso de Balanza y Martín Heredia Zaldo, dijeron fuentes judiciales.
Esos jueces habían revocado la absolución por el beneficio de la duda en favor del religioso, resuelta también por mayoría por el tribunal que lo enjuició. Y lo mandó a la cárcel por considerar probado que al menos en dos ocasiones, abusó en la casa parroquial de Valle Fértil de un menor (tenía 15 años) entre octubre y noviembre de 2017, aprovechándose de su inmadurez sexual y corrompiéndolo sexualmente, delitos que agravaron por ser ministro de un culto religioso.
El 5 de marzo pasado, el defensor de Bustos, Joaquín Moine, cuestionó ese fallo y pidió que lo revisara otro tribunal con la intención de derribarlo, ya que a su entender, se habían violado derechos y garantías fundamentales de su cliente, como el principio de inocencia, su defensa en juicio y el debido proceso legal. Y calificó la sentencia de arbitraria, entre otras razones, por darle un 'valor desproporcionado' al testimonio de la víctima y al de otro chico que también declaró haber abandonado la iglesia, porque en una ocasión Bustos intentó tocarlo y besarlo, cuando estaba ebrio.
Según Moine, el tribunal que aplicó un castigo de 10 años no valoró, por ejemplo, el testimonio de un hombre que declaró haber estado con el religioso en Astica cuando sucedieron los hechos, aportando fotos de ese encuentro, situación que el propio Bustos intentó reforzar al reconocer que llamó desde ese pueblo al joven que lo denunció y no desde el centro de Valle Fértil. Sin embargo las pericias telefónicas demostraron que el llamado se hizo desde la cabecera departamental y que en Astica no había señal telefónica. Y el tribunal no hizo lugar a las fotos, porque ninguna pericia corroboró que efectivamente se hubieran realizado ese día y en Astica, como se argumentó.
Los cruces telefónicos, los otros religiosos a los que el denunciante les contó sobre los ataques sexuales de Bustos y ameritaron abrir un sumario en la Iglesia Católica (actualmente está suspendido). O las psicólogas que calificaron al testimonio del denunciante como creíble (no fabulado) y con claras muestras de haber sido víctima de una situación de abuso sexual a manos del religioso, fueron algunas de las principales pruebas que el fiscal de Impugnación, Fabrizio Médici, y el fiscal del juicio, Mario Panetta, sostuvieron como 'pruebas contundentes' contra el cura, cuando cuestionaron el planteo de Moine.
Ahora, al sacerdote le queda reclamar ante la Corte de Justicia. Si el fallo quedara firme, se unificará con la pena de 3 años que le había impuesto la Corte, cuando revisó la condena de 1 año y 8 meses que le dieron por el abuso simple de un menor de su entorno íntimo, también en 2017 (tenía 15 años). Y se la elevó por considerar que cabía aplicarle el agravante de ser ministro de un culto religioso.
Justamente en medio de ese primer juicio (inicialmente fue denunciado por abusar de tres hermanos) es que recibió la denuncia por haber abusado de otro joven en Valle Fértil.