El colegio Santa María de Godoy Cruz volvió a ser noticia luego de que 115 estudiantes de 5° año recibieran una dura sanción por los daños provocados dentro del establecimiento el pasado 27 de noviembre. La protesta, motivada por el descontento ante la decisión institucional de flexibilizar las faltas el último día de cursado, terminó con cada alumno acumulando 20 amonestaciones.

Junto a la notificación, las familias recibieron también una propuesta de tareas reparadoras. Ese plan les permite a los jóvenes reducir la sanción a 16 amonestaciones si completan todas las actividades previstas. Para ello, este viernes los estudiantes sancionados -y en algunos casos sus propios padres- se acercaron a la escuela para iniciar las labores asignadas.

El esquema de trabajo, establecido por la resolución 065-REC-2025, funciona como una medida de restitución y contempla tareas pedagógicas, comunitarias y de servicio institucional. Las actividades comenzaron este viernes y continuarán hasta el 18 de diciembre.

Cada día se organiza por turnos: los grupos no pueden superar los diez alumnos y están acompañados por un docente o preceptor. Las jornadas se desarrollan de 8 a 12.30, con un único descanso entre las 10 y las 10.30. La asistencia es obligatoria; si un estudiante falta por enfermedad, deberá asistir en su lugar un adulto responsable. Además, durante el período de trabajo queda prohibido el uso de teléfonos: si se incumple la norma, el beneficio queda anulado.

Las tareas asignadas incluyen limpieza de mobiliario y paredes, ordenamiento de materiales deportivos y de espacios recreativos, clasificación de donaciones, armado y rotulación de cajas, confección de adornos navideños y cartelería. Para cerrar, el último día los alumnos deberán preparar un desayuno para el personal de limpieza y mantenimiento, ocasión en la que también tendrán que ofrecer disculpas públicas, ya sea de manera oral o por escrito.