El paso internacional que conecta la ciudad de Malargüe con Talca quedó habilitado a partir de las 13. Tiene horarios fijos hasta las 19 para el ingreso al país y 18 para la salida.
El invierno cordillerano volvió a poner a prueba la conectividad entre Argentina y Chile. Este miércoles, el Paso Internacional Pehuenche fue reabierto al tránsito luego de permanecer cerrado desde la tarde del martes, cuando un fuerte temporal de nieve en el sector chileno obligó a interrumpir la circulación por acumulación nívea.
La Ruta Nacional 145, principal acceso al paso, presenta condiciones de circulación que requieren atención especial: calzada húmeda, probables zonas con hielo y trabajos de reparación en algunos tramos complican el tránsito, por lo que se recomienda máxima precaución.
El intendente de Luján de Cuyo, Esteban Allasino, decidió separar los comicios municipales del calendario provincial y nacional. La jugada busca preservar el control territorial y evitar el efecto arrastre de alianzas que no terminan de consolidarse.
Este corredor binacional tiene una relevancia estratégica para el transporte de carga y de pasajeros, tanto por su ubicación como por los controles integrados que incluyen migraciones, aduanas y organismos de sanidad. La reapertura representa un alivio logístico, aunque también expone los desafíos de mantener operativo este cruce en temporada invernal.
Más allá de la habilitación puntual, el episodio vuelve a poner en evidencia la necesidad de una inversión sostenida en infraestructura vial y mantenimiento preventivo, especialmente del lado argentino, donde los recursos suelen ser más escasos.
En un contexto de clima adverso y alta dependencia logística, la recuperación de la conectividad internacional se convierte en una señal positiva, aunque con reservas. El invierno apenas comienza, y el Pehuenche ya demostró que cualquier nevada puede alterar la dinámica de la región.