Los casos incluyen desde certificados médicos apócrifos hasta mal manejo de fondos públicos. La Oficina de Ética Pública ya investiga las situaciones.
El Gobierno de Mendoza resolvió cesantear a seis empleados estatales por diferentes motivos que van desde ausencias laborales reiteradas sin justificación hasta irregularidades administrativas graves, incluyendo la posible falsificación de certificados médicos y manejo indebido de fondos públicos. Los casos fueron publicados en decretos oficiales y, en algunos, ya interviene la Oficina de Investigaciones Administrativas y Ética Pública.
Uno de los episodios más graves involucra a una empleada que presentó un certificado médico supuestamente emitido por un anestesista, pero que, al ser citado por la Dirección de Recursos Humanos, negó haberlo confeccionado. Según su declaración, la firma no era suya, desconocía a la paciente y jamás firmó ese documento.
Ante esta situación, la trabajadora fue cesanteada de forma inmediata y se dio aviso a la Oficina de Ética Pública, que podría derivar el caso a la Justicia por falsificación de documento.
Otro caso destacado es el de un contador de la Subsecretaría de Infraestructura Escolar, quien era responsable del Fondo sin Reposición del Registro de Antecedentes de Constructores de Obras Públicas. Una auditoría interna detectó múltiples irregularidades cometidas en 2020:
El tercer caso es el de un empleado del Ministerio de Salud que recibió el alta médica el 24 de diciembre de 2021, pero nunca volvió a trabajar. Estuvo ausente 67 días consecutivos sin justificar y desde abril de 2022 dejó de percibir su sueldo. La cesantía fue publicada en el Boletín Oficial tras agotar el proceso administrativo.
Una médica del Hospital Central fue cesanteada luego de faltar a cinco guardias de 24 horas durante 2023 (18 y 25 de septiembre, y 4, 11 y 18 de diciembre). Según el decreto, solo justificó dos faltas con certificados entregados fuera de término, y no presentó ninguna explicación por las otras tres ausencias.
Además, un trabajador del Ecoparque fue separado de su cargo tras acumular 40 días sin asistencia, aunque en este caso la medida fue de carácter preventivo debido a que el hombre es dirigente del gremio SITEA (Sindicato de Trabajadores Estatales).
Por último, un empleado de la Dirección de Hidráulica fue cesanteado tras faltar dos semanas sin aviso y acumular nueve llegadas tarde en su legajo.