A poco de cumplir 50 años, la actriz colombiana que conquistó Hollywood puede hacer gala de un historial amoroso digno de “la mujer más deseada del mundo”
A Sofía Vergara no le gusta hablar de su pasado amoroso. Con esa cadencia colombiana tan amable en su voz y una sonrisa algo desafiante, evade cada vez que puede las preguntas sobre los hombres que pasaron por su vida. “La pregunta que más odio es cuando me preguntan de mis novios, de mis amantes. Eso me molesta porque uno trata de tener privacidad. Así que te lo voy advirtiendo de una vez”, le aclaró a Jaime Bayly hace un par de años en un mano a mano y lo dejó de inmediato fuera de juego.
La periodista Pilar Castaño -”la primera dama de la moda en Colombia”-, en cambio, le arrancó entre carcajadas una confesión que describe a la perfección lo bien que la pasó la mega estrella de Barranquilla en el plano sentimental: “Yo he comido filet mignon”, se despachó.
A “la primera dama de la moda en Colombia”, como se la conoce a Castaño por su peso en el mundo fashionista del país cafetero, no le resultó nada complicado que Vergara se confiese. Solo necesitó de una brutal sinceridad: “Yo me acuerdo la envidia mía cuando salías con Luis Miguel. No vamos a hablar de eso, pero me acuerdo perfecto y luego, para rematar, entonces era Enrique Iglesias. Ya era para matarte pues”, acotó en una entrevista que hicieron por Zoom para Hola TV.
“Es que yo he tenido muy buena suerte, qué quieres que te diga. He tenido buena suerte. Yo he comido filet mignon”, respondió. Desde Joe González-Ripoll, el padre de su hijo, hasta Joe Manganiello, su esposo y gran amor, repasamos las grandes conquistas de una de las mujeres más deseadas del mundo.
Apenas tenía 18 años y daba sus primeros pasos como modelo cuando se casó con José Luis “Joe” González-Ripoll, el hijo de un reconocido arquitecto colombiano y alcalde de Barranquilla en dos oportunidades. Él le llevaba diez años y la razón que los empujó al altar fue un test de embarazo positivo.
El matrimonio duró dos años. Según publicó la revista colombiana Soho, la pasión que solían manifestar en público durante sus primeros meses de amor se desvaneció y el final llegó por una infidelidad: Joe la descubrió en una discoteca de Bogotá con otro hombre. Con los papeles de divorcio ya firmados, Sofía empezó a protagonizar cada vez más campañas publicitarias y su carrera despegó. La relación de la actriz con su primer amor siempre fue muy cordial: juntos criaron a Manolo, el único hijo de la celebrity y el hombre más importante en su vida.
Cuando su belleza la llevó hasta el festival de Viña del Mar para oficiar de presentadora, Vergara sacó provecho de la oportunidad mucho más allá del aspecto laboral: enamoró a Luis Miguel y su nombre empezó a recorrer el mundo. El flechazo, además de flashes y glamour, generó todo tipo de versiones en la prensa del corazón, sobre todo en relación al final de la amistad de El rey sol y el actor Jaime Camil, con quien Vergara mantenía una relación antes de conocer al cantante.
El amor llegó a su fin algunos meses después: según trascendió, pero nadie oficializó, el mexicano habría terminado con la relación cuando se enteró que era ella quien le decía a los paparazzi dónde encontrarlos.
Chicos malos, estrellas de Hollywood y cantantes latinos o de ritmos afroamericanos: la lista de amores de Sofía Vergara tiene hombres para todos los gustos. Y si bien no todas esas relaciones fueron confirmadas por sus protagonistas, sí salieron en la prensa y fueron noticia en el mundo.
Durante sus primeros años en Miami y luego de un fugaz romance con Enrique Iglesias, a la colombiana la relacionaron con Chris Paciello, el dueño de varios clubs nocturnos y reconocido mafioso de la movida ciudad de Florida. El fin de la relación llegó, según trascendió, cuando Paciello cayó preso en el año 2000 acusado de asesinato. Luego de una rotunda vuelta de página, Vergara se involucró en 2003 con el cantante británico de R&B Craig David, un “chico bueno”, según The Mirror, y con Puff Daddy, aunque de este encuentro no trascendió mucha información.
Vergara volvió a la tapa de las revistas dos años después cuando Tom Cruise quedó flechado al conocerla en el set de Cuatro hermanos. Sin poder sacarla de su cabeza, volvió a verla -y logró conquistarla durante la fiesta pos Oscar que Will Smith y su mujer organizaron en 2005. Según cuenta Andrew Morton en su libro Tom Cruise: la biografía autorizada, el protagonista de Misión Imposible organizó una cena con sus hijos y la joven de Barranquilla con el objetivo de evaluarla cómo madre.
Pese a que todo parecía ir a la perfección, Vergara puso fin al noviazgo. ¿El motivo? La obsesión de Cruise con la cienciología. Es que la actriz colombiana pensaba, según escribió Morrón, que iría “directamente al infierno” si aceptaba la propuesta de casamiento del actor.
Tras deshacerse de Cruise, trascendió un breve romance con Mark Wahlberg que nunca se confirmó. Quien sí se hizo cargo de inmediato de su irrefrenable pasión por la modelo fue el cantante Cristian Castro, quien incluso fue más allá en materia de halagos: llegó a admitir que su relación con Vergara fue la más inolvidable de todas las que tuvo y la definió como el gran amor de su vida.