El papa León XIV realizó la designación luego de que Timothy Dolan presentara su renuncia tras cumplir 75 años, edad en la que debe retirarse del cargo
El papa León XIV ha designado a Ronald A. Hicks, hasta ahora obispo de Joliet (Illinois), como nuevo arzobispo de Nueva York, en reemplazo del cardenal Timothy Dolan, quien presentó su renuncia tras cumplir 75 años, conforme a las normas vaticanas. El anuncio, realizado el 18 de diciembre, marca un cambio relevante en el liderazgo de una de las arquidiócesis más influyentes de Estados Unidos, con la instalación de Hicks prevista para el 6 de febrero en la Catedral de San Patricio.
La decisión del papa León XIV de elegir a Hicks para liderar la arquidiócesis de Nueva York, que atiende a entre 2,5 y 2,8 millones de católicos en el Bronx, Manhattan, Staten Island y áreas al norte de la ciudad, representa una de las primeras señales sobre la dirección que el pontífice desea imprimir a la Iglesia católica en su país natal, según The New York Times. La sede neoyorquina, históricamente asociada a figuras de gran peso político y mediático, atraviesa una etapa de transición tanto religiosa como social, en un contexto marcado por la inminente asunción del primer alcalde musulmán de la ciudad, Zohran Mamdani, y por desafíos internos de gran magnitud.
El nuevo arzobispo de Nueva York tiene experiencia trabajando en Latinoamérica
Ronald A. Hicks nació el 4 de agosto de 1967 en Harvey, Illinois, y creció en South Holland, en las afueras de Chicago, según la diócesis de Joliet. Se formó en el Niles College Seminary y obtuvo títulos en Filosofía, Divinidad y Ministerio en la Universidad Loyola de Chicago y la Universidad de Saint Mary of the Lake. Fue ordenado sacerdote el 21 de mayo de 1994 para la arquidiócesis de Chicago, donde ejerció como vicario parroquial y decano de formación. Posteriormente, fue director regional de la organización Nuestros Pequeños Hermanos en México y El Salvador, donde trabajó con niños huérfanos y en situación de abandono.
Entre 2010 y 2014, Hicks fue decano de formación en el Seminario Mundelein y, en 2015, asumió el cargo de vicario general de la arquidiócesis de Chicago, una de las posiciones administrativas más exigentes. En 2018, fue nombrado obispo auxiliar de Chicago y, en 2020, obispo de Joliet, donde lideró una diócesis de 520.000 católicos. Además, preside el comité de clero y vocaciones de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos, lo que le otorga un papel relevante en la formación y acompañamiento pastoral de sacerdotes y obispos.
Hicks es reconocido por su estilo pastoral cercano, su capacidad de escucha y su enfoque en la unidad y la justicia social. "He sido descrito como una persona de espíritu apacible, pero también capaz de ser firme y de marcar visión y agendas", declaró Hicks a The New York Times. Su experiencia en América Latina, especialmente en El Salvador, ha marcado su ministerio con una sensibilidad hacia los pobres y marginados, una característica que comparte con el papa León XIV, quien también vivió y trabajó en la región.
El nombramiento de Hicks supone un giro respecto al estilo de liderazgo de su predecesor, el cardenal Timothy Dolan, quien durante 16 años se destacó por su perfil conservador y su presencia mediática, según The New York Times. Dolan fue conocido por su defensa de causas conservadoras y su participación en debates nacionales sobre temas como el aborto y el matrimonio igualitario.
Christopher White, autor y analista citado por NPR, subraya que "la personalidad de Hicks es diferente a la de Dolan. No será tímido, pero aportará una seriedad y una disposición para aprender que probablemente le ayuden a nivel local, en contraste con la personalidad arrolladora de Dolan".