Nacido en Croacia en 1929, Frane Selak se ganó el apodo de "el hombre más afortunado (y desafortunado) de la historia" debido a una serie de eventos extraordinarios. Incluso Wikipedia lo describe como un caso único. Su vida, desde su inusual nacimiento prematuro en una barca en un lago, parece marcada por el peligro y la supervivencia.

Su asombrosa capacidad para escapar de la muerte comenzó en la década de 1960 y continuó durante más de tres décadas, desafiando a la muerte en siete ocasiones distintas.

Su primera prueba de supervivencia ocurrió en 1962 cuando el tren de Sarajevo a Dubrovnik en el que viajaba descarriló debido a una roca, cayendo a un río. Diecisiete personas murieron ahogadas. Selak, con un brazo roto, rompió una ventana y nadó hasta la orilla, siendo el único sobreviviente de su vagón.

En 1963, su primer y único vuelo se convirtió en otra experiencia aterradora. La puerta de emergencia se abrió en pleno vuelo y Selak fue succionado fuera del avión junto con una azafata, Rozika. Milagrosamente, ambos cayeron sobre un pajar y sobrevivieron. El avión se estrelló, matando a las 19 personas restantes a bordo.

Tres años después, en 1966, Frane Selak sobrevivió a un accidente de autobús que cayó de un puente a un río helado, donde murieron cuatro pasajeros. Selak escapó con solo rasguños. En 1970, su coche se incendió repentinamente mientras conducía, pero logró salir ileso segundos antes de que explotara. Tres años más tarde, en 1973, otro fallo en su coche provocó un incendio que le quemó el pelo y, según se dice, lo dejó calvo. En 1995, fue atropellado por un autobús en Zagreb, saliendo del incidente con heridas leves a pesar de ser lanzado por los aires. En 1996, su coche cayó por un acantilado de casi 100 metros al intentar evitar una colisión con un autobús de la ONU. Selak saltó del coche justo antes de que cayera, agarrándose a un árbol y sufriendo solo rasguños en las manos.

Tras una vida de tragedia y supervivencia, la fortuna de Frane Selak cambió radicalmente. En 2003, dos días después de cumplir 74 años, compró un billete de lotería y, para su sorpresa, ganó 800.000 euros.

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Curiosidades

Ocurrió en Inglaterra. Sufrió un paro cardiorrespiratorio. "Creo que fue por haber visto a toda su familia triste", dijo la hija.