Al menos 31 palestinos murieron y más de 200 resultaron heridos este domingo durante un violento incidente en un centro de distribución de ayuda humanitaria en Rafah, según informó el Ministerio de Salud de Gaza. Las víctimas presentaban impactos de bala en cabeza y pecho, según reportes médicos, en lo que testigos describieron como "disparos aleatorios" contra civiles que esperaban alimentos.

Mientras el gobierno palestino responsabilizó al ejército israelí, las FDI negaron participación: "No hubo bajas causadas por nuestro fuego", declararon a CNN. La Gaza Humanitarian Foundation (GHF), entidad respaldada por EE.UU. que opera el centro, aseguró que la distribución "ocurrió sin incidentes" y acusó a Hamás de difundir información falsa.

Sin embargo, testimonios recogidos por CNN describieron escenas de pánico: "Ni siquiera llegamos a la zona de reparto", relató Ghassan Eid Al-Aghan, uno de los afectados.

El suceso expuso las tensiones alrededor del polémico sistema de ayuda de GHF, criticado por la ONU por omitir verificaciones de identidad y exponer a civiles a riesgos. Aunque la fundación afirmó haber distribuido 4.7 millones de comidas en seis días, testigos reportaron que la mayoría se fue sin recibir alimentos.

El incidente ocurrió cuando Gaza enfrenta niveles críticos de hambruna, con mecanismos de ayuda internacional bajo escrutinio por su eficacia y seguridad. Las investigaciones continúan mientras aumentan las denuncias sobre violaciones al derecho humanitario en zonas de distribución.