Está por terminar agosto y vuelve la tensión por el índice inflacionario, un número que recaerá totalmente sobre las espaldas del ministro de Economía, Sergio Massa, quien ya había advertido que julio y agosto serían duros. La mayoría de las consultoras proyectaron un piso de 6%, pero ahora algunas anticiparon que el indicador volvería a estar cerca del 7% que arrojó julio. El Gobierno sigue apostando a la desaceleración; hasta ahora no se ve.
Agosto será el primer dato de inflación con el que debutará Sergio Massa como ministro de Economía y las consultoras, a pocas horas de concluir el mes, ya advierten que tendría un piso del 6%. El Gobierno necesita una desaceleración del IPC que ya se estima rondará el 90% para este año, según el relevamiento de expectativas de Mercado del BCRA, en un contexto además donde los precios de los alimentos no paran de subir mientras que en el mundo bajan. Varios productos alimenticios ya acumulan un alza del más del 100% en lo que va del año.
Para el relevamiento de precios minorista de la consultora EcoGo, a cargo de Marina dal Poggetto, la inflación de agosto se ubicaría en 6,7%. “Los productos regulados impulsaron el indicador general del mes con subas en prepagas con un 11,34%, colegios en PBA 9%, tarifas de trenes y colectivos en el AMBA 40%, los combustibles subieron en promedio un 8,5% y las expensas entre un 6 y 10%”, destacó el informe.
Si bien, como marcó el presidente Alberto Fernández esta semana, el problema de la inflación “es un problema que lleva décadas” y no nació con este gobierno, el oficialismo deberá redoblar apuestas para apaciguar esta dinámica inflacionaria que se está colocando en máximos, desde hace varios años y se encuentra a la puerta de entrada de los tres dígitos anual.
En este sentido, el IEM de la Universidad Austral remarcó que frente a una inflación interanual de 71%, una inflación promedio mensual de 5,6% y expectativas inflacionarias que se sitúan cercanas al 100% para este año, “a los fines de afectar las expectativas será determinante que la agenda de economía debe establecerse en la comunicación de un programa macroeconómico de estabilización con metas mensuales alcanzables y reasignación de erogaciones fiscales”.
Hay productos que ya acumularon aumentos mayores al 100% en lo que va de este año
En esa sintonía parece que apunta Massa con el recorte en los ministerios y cuando el miércoles recibió a representantes de empresas de alimentos, bebidas y cuidado personal, con el “objetivo de llevar orden a la mesa de los argentinos”, según señalaron en el comunicado.
Del encuentro también participó el secretario de Comercio Matías Tombolini, área clave en materia de precios y del cual ya pasaron cinco nombres en este sector sin mucha suerte en materia inflacionaria.
Para EcoGo, la tercera semana del mes registró una variación del 1,6% de los precios de los alimentos con respecto a la semana anterior. “Con este dato y considerando una proyección de variación semanal del 1,4% para la última semana del mes, la inflación de alimentos consumidos en el hogar en agosto treparía al 5,7%”, destacó el informe.
Por su parte, Consumidores Libres informó que el precio de los 21 productos de la llamada “canasta básica de alimentos” tuvo un aumento del 2,9% durante la primera quincena de agosto. Estuvo impulsado por los productos de almacén que subieron en promedio un 4,5%, seguido de carnes que da un total de 2,5%, y el total de frutas y verduras un 0,6% en la primera mitad del mes.
Sin embargo, en el relevamiento a cargo de Héctor Polino se observan algunos productos con un acumulado por arriba del ciento por ciento en lo que va del año: azúcar 109,5%, harina de trigo 105,8%, zanahorias 113,5%, cebolla 155,5%, acelga 105,5 % y huevo colorado 100%. Cabe destacar que el Indec señaló que el IPC general acumuló de enero a julio un 46,2%.
Juan José Llach, profesor emérito del IAE Business School, analizó el contexto económico internacional. Llach señaló que “el contexto global está ayudando, por ahora, a la Argentina, fundamentalmente por el precio de los granos y también con los combustibles si Vaca Muerta estuviera funcionando”. En ese sentido, destacó que “para aprovechar estas oportunidades, nuestro país tendría que tener un rumbo claro y sensato y acuerdos políticos suficientemente sólidos que, lamentablemente, todavía están lejos, pero puede que se manifiesten en 2023”.