Economía & Negocios Avances legislativos

Casa Rosada celebra el fin de año: señales de reactivación, reducción de la inflación y del riesgo país

El repunte del consumo, la menor demanda de dólares y la baja del riesgo país alimentan el optimismo oficial de cara al primer semestre de 2026.

Domingo, 28 de Diciembre de 2025

Los dos meses posteriores a las elecciones legislativas se desarrollaron en línea con las expectativas del Gobierno. La victoria electoral, incluso por encima de los pronósticos previos, generó un clima de euforia en los mercados y un renovado optimismo entre los inversores. Las variables financieras se acomodaron con rapidez y ahora la principal incógnita es cuánto de ese efecto positivo comenzará a sentirse en la economía cotidiana.

Las primeras señales llegaron desde el consumo. Según los datos difundidos por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), las ventas de Navidad mostraron un leve repunte interanual del 1,3%, el primer dato positivo en casi nueve meses. Si bien el crecimiento fue moderado, marca un posible punto de inflexión luego de una prolongada etapa de caídas.

El dato contrasta con lo ocurrido en otras fechas clave del año. En el Día de la Madre, celebrado en octubre, las ventas habían caído 3,5%, mientras que en el Día del Niño el retroceso fue del 0,3%, con una fuerte baja del 21% en el ticket promedio en términos reales. En ese contexto, CAME destacó que el 32% de los comerciantes aseguró haber vendido más de lo esperado durante las fiestas de fin de año.

Menor presión sobre el dólar

La tibia recuperación del consumo se vincula también con una fuerte reducción en la demanda de dólares. De acuerdo con datos oficiales del Banco Central, las compras netas del público sumaron USD 1.088 millones, muy por debajo del pico de USD 4.600 millones registrado en septiembre, tras la victoria del kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires.

Este cambio implica que una mayor cantidad de pesos dejó de canalizarse hacia el dólar y se destinó al consumo, la inversión o el gasto corriente. Hacia adelante, se espera que la demanda mensual de divisas se estabilice en torno a los USD 2.000 millones, un nivel considerado manejable tanto para el mercado interno como para la acumulación de reservas.

En ese sentido, las reservas brutas alcanzaron su nivel más alto durante la gestión de Javier Milei. Solo el viernes aumentaron USD 600 millones, hasta ubicarse en USD 43.610 millones. Todo indica que el Tesoro está aprovechando la menor presión cambiaria para comprar divisas con el objetivo de afrontar el vencimiento de deuda del 9 de enero, por USD 4.200 millones.

Inflación, riesgo país y bonos

Diciembre cierra con varias señales alentadoras para el oficialismo. La inflación mostraría su primera baja en seis meses y, según mediciones privadas, se ubicaría apenas por encima del 2%, por debajo del 2,5% de noviembre. La estabilidad cambiaria y una menor presión de los precios de la carne contribuyeron a moderar los aumentos en un mes estacionalmente complejo.

El riesgo país descendió a la zona de los 550 puntos básicos, mínimos desde enero, y el mercado apuesta a que en enero pueda perforar los 500 puntos. Juegan a favor del Gobierno la posible reinversión de parte de los pagos de deuda y un escenario internacional más favorable, con expectativas de bajas de tasas por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos.

Aunque 2025 fue un buen año para los bonos de mercados emergentes, la Argentina había quedado al margen por la incertidumbre electoral. Ese escenario comenzó a revertirse tras los comicios.

El desafío que viene

De cara a 2026, el dólar aparece como una de las principales incógnitas. Algunos analistas, como el economista Fernando Marull, proyectan que el tipo de cambio podría alcanzar los 1.850 pesos a fines del próximo año, lo que implicaría una suba por encima de la inflación y evitaría un nuevo atraso cambiario.

Finalmente, las leyes sancionadas por el Congreso, entre ellas el Presupuesto, representaron un respaldo político clave para el Gobierno. Contar con un Presupuesto aprobado con apoyo de sectores de la oposición es una señal valorada por los mercados y acerca al equipo económico a su objetivo central del primer trimestre de 2026: volver a emitir un bono en los mercados internacionales, algo que no ocurre desde hace ocho años.