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El BID apuesta por Argentina como impulsor económico de América Latina

En medio de la incertidumbre global por los cambios en Estados Unidos, las previsiones para el país reflejan que podría impulsar el crecimiento en América Latina y que aumentaría sus exportaciones

Jueves, 3 de Abril de 2025

La incertidumbre global por el "efecto Trump" contrasta con las proyecciones que el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) volcó para la Argentina en su informe "Oportunidades regionales en medio de cambios globales". Allí describió que la recuperación del país esperada para 2025 será "un motor fundamental en el crecimiento económico de América Latina", se identificaron posibles incrementos de exportaciones a China y a la Unión Europea, en caso de cerrarse el acuerdo con el Mercosur. Asimismo, el documento especificó que la inflación, cuya desaceleración refleja uno de los logros de la gestión de Javier Milei, recibe más influencia de factores locales que internacionales.

"Después de una expansión inesperadamente sólida del 3,3% en 2024, se prevé que el crecimiento se desacelere a 2,1% en 2025?, sostuvo el informe del BID sobre las perspectivas para América Latina y el Caribe. "Un motor fundamental de este panorama es la recuperación esperada en Argentina después de una recesión profunda en 2024, que según las previsiones impulsará el crecimiento regional en 2025?, completó sin dar números o mayores previsiones del crecimiento esperado para el país.

El capítulo sobre la inflación incluyó dos aristas sobre influencia mundial e impacto de medidas como restricciones cambiarias o metas anuales. En relación con la primera de ellas, la comparación de lo que sucedió en el mundo a nivel precios y lo que ocurrió en la Argentina. Uno de los gráficos del BID mostró que mientras la curva del índice general global bajaba, en el país creció. En consecuencia, el documento indicó que "en el caso de Argentina, la inflación parece estar impulsada en gran medida por factores idiosincráticos" con un componente internacional "insignificante".

Además, el estudio comparativo dentro de la región entre países como Argentina, Brasil, Uruguay, México, Chile, Venezuela, entre otros, también arrojó conclusiones por parte del equipo del BID. "Los regímenes de 'Tipo de cambio fijo y a los regímenes de 'Metas de inflación' han experimentado tasas de inflación general más elevadas. La heterogeneidad dentro de este grupo es significativa, incluyendo economías que han enfrentado niveles persistentemente altos de inflación en los últimos años, como la Argentina, Haití y Venezuela", indicó el informe.

"La tasa media de inflación anual en la región se redujo al 3,8% a finales de 2024, tras alcanzar un máximo del 9,8% en julio de 2022?, destacó el comunicado oficial del BID. De esta manera, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de 2024 en Argentina cerró 114, puntos porcentuales por arriba del promedio de América Latina y el Caribe, ya que marcó 117,8%.

Por otra parte, el documento del BID no fue ajeno al contexto de incertidumbre que atraviesa al comercio internacional. En función de ello, elaboró distintos escenarios, como el que contempla que China "responde con medidas recíprocas a un aumento adicional del 10% en los aranceles estadounidenses". De este modo, proyectaron un aumento del 9,5% de las exportaciones argentinas de productos agrícolas hacia el país liderado por Xi Jinping. Colombia es otro país que podría verse beneficiado, con un incremento del 11,4% y Brasil, con uno del 5,3%.

Otra simulación económica volcada en el informe analizó los efectos de una posible entrada en vigencia del acuerdo comercial entre el Mercosur y la Unión Europea. "Se prevé que las exportaciones de Argentina aumentarán en un 10%, con un crecimiento considerable dirigido a destinos clave de la UE, como Países Bajos, Italia, España y Alemania", consideraron.

El mundo laboral también puede presentar novedades, de acuerdo con el trabajo del BID. Contemplaron qué impacto puede tener la inteligencia artificial. En ese sentido, relevaron que dentro de un año habrá 3.722.179 empleados expuestos a esta herramienta. Es decir, poco más de un cuarto de la cantidad de personas con trabajo registrado hasta diciembre del año pasado. La proyección estipuló que en 2030 serán más de cinco millones los que utilicen estos avances tecnológicos.

Por último, el comunicado del BID cerró con una advertencia a los países para navegar con éxito un año catalogado con la palabra "cambiante". La entidad recomendó "acumular reservas". A propósito de esto último, el Gobierno negocia con la entidad presidida por el brasileño Ilan Goldfajn desembolsos extra que se sumen a los US$20.000 del Fondo Monetario Internacional.

Fuente: La Nación