Tras la derrota ante Rennes, los futbolistas protagonizaron una violenta pelea en el vestuario. El presidente del club confirmó que ambos fueron apartados y están a la venta.
El Olympique de Marsella quedó sacudido en las últimas horas por un escándalo inesperado: Adrien Rabiot y Jonathan Rowe protagonizaron una feroz pelea en el vestuario luego de la derrota 1-0 frente al Rennes por la Liga de Francia. El enfrentamiento incluyó gritos, empujones y golpes, lo que derivó en la inmediata decisión dirigencial de apartarlos del plantel profesional.
"Fue un evento de una gravedad y una violencia extrema, algo inaudito. Superó todos los límites aceptables en un club de fútbol, o en cualquier organización", declaró a la agencia AFP el presidente del Marsella, Pablo Longoria, quien además confirmó que ambos jugadores fueron puestos en venta.
Según el directivo, "todo lo transmitido por el staff deportivo y no deportivo" dio cuenta de un episodio fuera de control. "Roberto De Zerbi, Medhi Benatia y yo sumamos más de 50 años de experiencia en el fútbol. Nunca vimos algo así", agregó.
La decisión sorprendió especialmente en el caso de Rabiot, referente del equipo y subcampeón mundial con Francia en Qatar 2022. "¿Creen que estoy contento con tener que llegar a esta situación con uno de los mejores jugadores de la temporada pasada? Es alguien al que presenté como un ejemplo", admitió Longoria.
En tanto, Rowe ya estaba en carpeta para una posible salida por su poca participación en la temporada anterior, aunque no se esperaba una resolución tan drástica.
"Sufrimos esta situación. Somos víctimas de una pelea sin límite, completamente inaudita en el mundo del fútbol", concluyó el dirigente, que dejó en claro la gravedad del episodio que hoy sacude al Marsella.