Los restos se encontraban “intactos”, para la extracción y preservación de rastros genéticos para realizar un cotejo de ADN
Un vigilador privado que transitaba por un camino rural cercano a la planta de residuos patogénicos, en Capdevila, Las Heras, encontró un cráneo humano e inmediatamente alertó a las autoridades policiales.
El hombre divisó algo que le llamó la atención a unos 20 metros de su vehículo. Primero pensó que era una cabeza de muñeca. Pero cuando se bajó del auto en el que circulaba, se acercó a pocos metros y vio que había perros merodeando en el lugar, confirmó que se trataba de una cabeza humana.
Sin perder tiempo, llamó al 911 y personal policial de la jurisdicción llegó hasta la escena para comprobar lo que habían detallado previamente en la zona de la planta de residuos de elementos patogénicos de Capdevila, cerca de ruta 40, muy cerca del basural de Las Heras.
Los uniformados dieron aviso al Ministerio Público y minutos después Policía Científica y la Unidad Investigativa departamental comenzaron a trabajar en el caso descubierto y se desconocía si el cráneo pertenecía a una mujer o un varón pero, por algunos exámenes preliminares forenses, fuentes judiciales y policiales coincidieron en una hipótesis: “Podría pertenecer a una mujer”.
Agregaron que los restos se encontraban “intactos” para la extracción y preservación de rastros genéticos para realizar un cotejo de ADN en caso de que lo requiera la autoridad judicial a cargo de la causa, deslizando que podrían estar frente al inicio de una investigación sobre asesinato.
El cráneo, explicaron las fuentes de la Oficina Fiscal Nº5, quienes trabajaron en el caso para solicitar las primeras medidas -llamativamente, no ordenaron búsqueda de las otras partes del cadáver con canes- presentaba color de pelo amarillo “teñido” y la mayoría de las piezas dentales.