Otro intendente kirchnerista vuelve a recurrir al manual clásico del populismo: crear un nuevo impuesto para cubrir el desorden fiscal. Esta vez ocurrió en Ushuaia, donde el jefe comunal camporista Walter Vuoto impulsó y logró aprobar un tributo municipal destinado a financiar un denominado "Programa Municipal de Sepelio Solidario".

La iniciativa establece el cobro de un 10% adicional sobre la Tasa General de Servicios que pagan todos los propietarios de la capital fueguina. Según estimaciones expuestas durante el tratamiento en el Concejo Deliberante, la recaudación podría rondar los 1.200 pesos por persona, aunque el proyecto no presenta cifras oficiales ni proyecciones detalladas.

El proyecto ingresó a último momento, sin pasar por comisiones y fue aprobado en la última sesión del año con los votos del PJ, Forja y el Movimiento Popular Fueguino. Se opusieron bloques de Provincia Grande, Somos Fueguinos y La Libertad Avanza, que cuestionaron tanto la forma como el fondo de la medida.

Desde la oposición advirtieron que el tratamiento exprés genera serias dudas sobre el alcance real del impuesto. Señalaron que no queda claro cómo se implementará el cobro, quién administrará los fondos ni cuáles serán los criterios de acceso al beneficio. En los hechos, se trata de una tasa obligatoria que deberán pagar todos los contribuyentes, independientemente de que utilicen o no el servicio.

El programa prevé cubrir los gastos de sepelio de cualquier residente que lo solicite. Sin embargo, uno de los puntos más polémicos es que, si la persona fallecida ya contaba con un seguro privado de sepelio, el municipio igualmente pagará a la familia un monto equivalente al costo del servicio. Esto despertó fuertes críticas por la posible superposición con servicios privados y el uso discrecional de fondos públicos.

Empresarios del sector funerario también expresaron su rechazo. Desde la Cámara Metropolitana de Empresas de Sepelios señalaron que la iniciativa replica una ley provincial de 2021 que nunca fue reglamentada y advirtieron que avanzar a nivel municipal podría resultar inconstitucional. Además, remarcaron que no existe en el país un sistema obligatorio de sepelio universal financiado con una tasa compulsiva.

Mientras el Gobierno nacional avanza en la reducción de impuestos y la eliminación de tasas distorsivas, municipios gobernados por el kirchnerismo siguen profundizando un modelo que encarece el costo de vida y castiga a los contribuyentes. Ushuaia acaba de sumar otro ejemplo.

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