La investigación continúa pero no hubo posibilidad de realizar una cámara Gesell. Hay dos docentes que continúan de licencia
Varias semanas pasadas de aquel 10 de septiembre que sacudió a la comunidad educativa de La Paz, la alumna que protagonizó el hecho ya recibió el alta médica y se encuentra en su casa, rodeada de su familia. Ahora, la mirada está puesta en entender qué fue lo que le ocurrió en ese momento.
La investigación sigue en marcha y uno de los pasos pendientes es la realización de la cámara Gesell, una instancia clave para escuchar a la adolescente en un entorno cuidado. Mientras tanto, los investigadores trabajan sobre distintas hipótesis, entre ellas la posibilidad de que haya sido víctima de acoso en internet.
En los primeros días, también se habló de un posible caso de bullying escolar, algo que nunca fue detectado por los adultos y que todavía forma parte de las dudas que buscan despejarse.
El episodio dejó huella en la escuela Marcelino Blanco. La profesora de Matemática, a quien la alumna pidió ver insistentemente durante la crisis, pidió una licencia prolongada para poder atravesar lo ocurrido. Lo mismo hizo otra de las educadoras.
La preceptora, que fue la primera en acercarse a la estudiante, y que incluso le pidió que entregara el arma, también había solicitado licencia. Sin embargo, desistió de seguir adelante con el trámite porque debía viajar varias veces a la Ciudad para completarlo.

A más de una semana del hecho en la escuela Marcelino Blanco, de La Paz, nuevas pruebas direccionaron una hipótesis sobre la adolescente de 14 años