El accidente de un camión frigorífico en el Acceso Este derivó en una escena de desesperación y violencia. Vecinos intentaron llevarse la carga, la policía respondió con balas de goma y gases. El conductor fue rescatado con vida.
El mediodía del lunes en Guaymallén se convirtió en un escenario de tensión y caos. Un camión cargado con carne desbarrancó en el Acceso Este, a la altura de la calle Cañadita Alegre, y lo que comenzó como un accidente vial terminó en un enfrentamiento entre vecinos y fuerzas de seguridad.
El vehículo, que circulaba por la autopista, perdió el control tras impactar contra una camioneta utilitaria. El rodado cayó sobre la banquina, rompió el guardarraíl y terminó volcado, bloqueando por completo el túnel de la calle. El conductor quedó atrapado, pero fue rescatado por personal policial y se encuentra fuera de peligro.
Minutos después del siniestro, decenas de personas comenzaron a acercarse al lugar con carritos y bolsas, intentando llevarse la carne que había quedado esparcida. La escena se volvió caótica: efectivos de la Policía de Mendoza e Infantería intentaron contener la situación, pero fueron recibidos con piedrazos. Para dispersar a la multitud, utilizaron balas de goma y gases lacrimógenos.
Los automovilistas que circulaban por la lateral del Acceso Este quedaron atrapados en medio del conflicto, mientras el operativo policial intentaba recuperar el control del área. "Afortunadamente no había peatones en el túnel en el momento del accidente", señaló el subdirector de Seguridad Vial de Guaymallén, quien también indicó que el desperfecto en una rueda del vehículo utilitario habría sido el origen del choque.
El episodio, que aún está en desarrollo, expone no solo la fragilidad de la infraestructura vial, sino también la tensión social que puede estallar ante una oportunidad inesperada de acceder a alimentos. La carne, símbolo de necesidad, se convirtió en detonante de una jornada marcada por la violencia y la desesperación.