Mundo Inaugurará la Asamblea

Trump va a la ONU para defender la ofensiva de Israel en Gaza y tratar la situación de Ucrania 

El presidente EEUU relativiza a las Naciones Unidas, pero aprovechará la Asamblea General para ratificar su política exterior, explorar opciones para concluir la guerra en Europa y exigir a Hamas que libere a los 48 rehenes judíos

Lunes, 22 de Setiembre de 2025

Donald Trump relativiza el peso geopolítico de las Naciones Unidas, pero asume su protagonismo mediático cuando organiza la Asamblea General que sesiona desde 1945. El presidente de los Estados Unidos no está dispuesto a perder esa vidriera global y por eso en las próximas 72 horas se encontrará en Manhattan para ocupar el centro del tablero internacional.

Al comenzar su segundo mandato presidencial, Trump solicitó a Marco Rubio -secretario de Estado- que analizara el rol de la ONU en relación a la agenda exterior que pretendía cumplir en los próximos cuatro años.

Rubio recomendó recortar los fondos que Washington aporta al foro global y retirar a Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud, UNESCO, el Consejo de Derechos Humanos y el acuerdo de Cambio Climático.

Trump convalidó la propuesta de Rubio, y desde ese momento quedó en evidencia que apostaba a la diplomacia presidencial y consideraba a los organismos multilaterales una pérdida de tiempo.



Donald Trump y Benjamín Netanyahu durante su último encuentro en la Casa Blanca
 

En este contexto, Trump viajará a New York para multiplicar la exposición de su hoja de ruta global, abogar por el derecho de Israel de terminar con Hamas en Gaza y dialogar con Volodimir Zelensky para encontrar un punto de inflexión que permita cerrar un cese del fuego con Vladimir Putin.

El presidente de Estados Unidos exprime el concepto de realpolitik cuando toma decisiones que se ejecutan en la ONU.

No le importan las votaciones en la Asamblea General, utiliza su veto en el Consejo de Seguridad para bloquear las posiciones comunes de Rusia y China, y suma reuniones bilaterales aprovechando la concurrencia casi perfecta de los mandatarios extranjeros.

Con esa perspectiva utilitaria, Trump este año forzó al máximo su displicencia política frente a la ONU.

Decidió que el Departamento de Estado no otorgue visa diplomática a Mahmoud Abbas -titular de la Autoridad Nacional Palestina- y a los 80 asesores que lo acompañarían en la Asamblea General.

La decisión de Trump se sostiene por su mirada sobre Israel, el terrorismo palestino que protagoniza Hamas y la guerra en Gaza.

Francia mañana encabeza una conferencia en Naciones Unidas que tiene como finalidad reconocer a Palestina como estado, una decisión política que fortalece al grupo terrorista Hamas.


Palestina esta integrada por Gaza y Cisjordania: Gaza es controlada por Hamas, mientras que su poder real en Cisjordania es completo.

Para evitar que Abbas y su delegación festejen la decisión de Francia, Estados Unidos negó las visas a las autoridades formales de Cisjordania.

Junto a Francia se alinearán Andorra, Australia, Bélgica, Canadá, Luxemburgo, Portugal, Malta, Reino Unido y San Marino.

Dos días antes de la conferencia sobre Palestina convocada por Emmanuel Macron, Hamas publicó una composición fotográfica que exhibe los retratos de los 48 rehenes que aún secuestra en Gaza.

Además de inaugurar la Asamblea General y reclamar por la libertad de los 48 rehenes en poder de Hamas, Trump se encontrará con Volodimir Zelensky -presidente de Ucrania- para explorar nuevas alternativas diplomáticas frente a Putin.

Tras la cumbre de Alaska, adonde se reunieron Trump y Putin, el conflicto en Ucrania se profundizó por la ofensiva militar ordenada desde el Kremlin. Putin soslayó los argumentos de Trump, y la relación entre ambos mandatarios se encuentra en su peor momento.
En el marco de la
En el marco de la Asamblea General de la ONU, Trump se encontrará con Zelensky para explorar nuevas alternativas diplomáticas frente a la agresión rusa en Ucrania (Europa Press)